El diplomático brasileño Paulo Sérgio Pinheiro, quien encabeza la comisión de investigación para ese país creada por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, fue el encargado de repartir las críticas a los países que participan con asistencia militar al gobierno sirio o a los rebeldes.

"La causa del éxodo sirio es que allí los civiles son los principales blancos de los ataques de las partes en conflicto", dijo Pinheiro en un debate del Consejo sobre el conflicto realizado en Ginebra.

"Tanto el gobierno de Bashar al Assad como los distintos grupos rebeldes y la milicia terrorista Estado Islámico (EI) cometen crímenes de guerra y aterrorizan a la población", agregó el diplomático de la ONU.

Por tal razón, el diplomático instó a Rusia, Estados Unidos y al Consejo de Seguridad de la ONU a trabajar en una solución. "Tiene que cesar el envío de armas a Siria y los Estados con influencia en la región tienen que apoyar sin condiciones los esfuerzos del enviado especial de la ONU para conseguir negociaciones que lleven a la paz".