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Joseph Blatter debió responder una serie de preguntas de los fiscales suizos en calidad de "imputado", mientras su oficina era allanada tras la reunión del comité ejecutivo de la FIFA, en Zúrich. Su abogado, Richard Cullen, desligó a su cliente de las acusaciones y aseguró que "definitivamente no hubo ningún manejo irregular" de su parte.

"El señor Blatter está cooperando y tenemos confianza de que las autoridades suizas van a tener la posibilidad de revisar los documentos y la evidencia y ver que el contrato fue preparado y negociado adecuadamente por los miembros del staff de la FIFA que habitualmente son responsables de estos contratos", señaló el letrado.

Según el comunicado de la oficina del fiscal general suizo (OAG), Blatter es sospechoso de haber cerrado un contrato desfavorable para la FIFA en septiembre de 2005 con el triniteño Jack Warner, entonces jefe de la Unión Caribeña de Fútbol.

Además, el suizo de 79 años es acusado de haber realizado un "pago desleal" a Platini, aunque se alega que el dinero era en compensación por trabajo realizado entre enero de 1999 y junio de 2002.

Antes del anuncio de la fiscalía, la FIFA había cancelado inesperadamente y en el último momento la conferencia de prensa con el presidente del organismo, programada para después de la reunión del Comité Ejecutivo, de modo tal que las razones se hicieron dos horas y media más tarde.

Tras el anuncio de la fiscalía, la FIFA emitió un comunicado en el que asegura que "ha estado cooperando con la oficina del fiscal general suizo y ha cumplido con todos los requerimientos de documentos, datos y otras informaciones. Vamos a continuar en este nivel de cooperación durante la investigación".

"Hoy, en la sede de la FIFA, representantes de la oficina del fiscal general suizo llevaron adelante entrevistas y recogieron documentos de conformidad con la investigación. La FIFA facilitó estas entrevistas como parte de la cooperación en marcha", añadió el ente rector antes de aclarar que no hará más comentarios sobre el asunto.

La investigación a Blatter ocurre una semana después de que Jérôme Valcke, el influyente secretario general de la FIFA, fuera suspendido de su cargo tras ser acusado de haberse lucrado con la venta de entradas mundialistas en el mercado negro. Blatter ya anunció que dejará la presidencia de la FIFA después de las detenciones de múltiples directivos a fines de mayo, para lo cual convocó a un congreso extraordinario que se realizará el 26 de febrero.