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Un fallo firmado por los dos titulares del Tribunal Oral Federal a cargo del juicio, que tendrá en el banquillo a unos 20 acusados, los jueces Gabriel Casas y Carlos Jiménez Montilla, señaló que la exmandataria no será citada como testigo para "garantizar el derecho a no declarar contra sí mismo, es decir, a no autoincriminarse".

"Al ser público y notorio que Estela Martínez de Perón se encuentra denunciada e investigada en la causa, no corresponde su comparecencia", explicó la resolución dada a conocer hoy por el Tribunal que integra también, como subrogante, el juez Juan Carlos Reynaga.

A un mes y medio del comienzo del juicio, la Cámara Federal de Casación Penal aún debe pronunciarse sobre si será citada a declaración indagatoria como imputada la ex presidenta María Estela Martínez de Perón o Isabel, como se la conoció durante su actuación política.

El pedido de que se la indague fue formulado en abril de 2014 por los fiscales Pablo Camuña y Patricio Rovira a raíz de que la entonces Presidenta puso en marcha el Operativo Independencia mediante el Decreto 262/75 y tuvo "una complicidad por omisión, ya que no hizo aquello a lo que estaba obligada", en los delitos investigados.

En este marco, el Tribunal resolvió "no hacer lugar a la citación como testigo de Estela Martínez de Perón".

El Operativo Independencia decretado en febrero de 1975 desató en Tucumán y también en provincias vecinas del noroeste argentino un violento plan sistemático de exterminio de opositores mediante el terrorismo de Estado y con complicidad de factores de la sociedad, de acuerdo con la acusación del Ministerio Público Fiscal.

Fue el gran "laboratorio de ensayo" de las prácticas genocidas que se extendieron a todo el país después de consumado el golpe del 24 de marzo de 1976, que derrocó a María Estela Martínez de Perón.

El juicio oral y público comenzará el 5 de mayo y se desarrollará en audiencias que se realizarán los jueves y viernes, según informó que la Secretaría de Derechos Humanos del Tribunal, a cargo de Mariano García Zavalía. Se estima que el mega-juicio durará al menos un año y será el más grande realizado en Tucumán por el número de víctimas (269), de imputados y de querellas.

El proceso oral comenzará con alrededor de 20 acusados pero ese número podría crecer sensiblemente aun después de iniciado, como sucedió en otras mega-causas como las de la ESMA en Buenos Aires y La Perla en Córdoba.

La fiscalía presentó unos 1.500 testigos, de los cuales alrededor de la mitad van a declarar efectivamente en el juicio. A diferencia de los 11 juicios de lesa humanidad ya realizados en Tucumán, en los que los casos se reunieron por centro clandestino, en esta oportunidad fue por las fechas en las que sucedieron los hechos y, por lo tanto, se abordarán delitos cometidos en todos los centros que formaron el circuito represivo.