Las parejas ganadoras del Mundial de Tango, a la izquierda los argentinos Natacha Poberaj y Gustavo Peralta, ganadores de la categoría Tango Salón. A la derecha Carlos Alberto Paredes y Diana Giraldo Rivera, colombianos, los mejores en Tango Escenario.

Carlos Alberto Paredes y Diana Giraldo Rivera, oriundos de Cali, se consagraron campeones mundiales de la especialidad, tras recibir una ovación del público que los siguió en el certamen.

La Argentina había ganado las anteriores tres ediciones, en 2003, 2004 y 2005, pero esta vez fueron los colombianos los que se adjudicaron el cetro en disputa, indicó la agencia DPA.

En la categoría Tango Salón los campeones fueron la pareja argentina conformada por Natacha Poberaj y Gustavo Peralta, que se alzaron con el titulo en la noche del sábado.

En total 35 parejas fueron finalistas en ese rubro, de las cuales once representaron a Cali y Medellín (Colombia); Florencia, Bergamo, Siracusa y Milán (Italia), Stuttgart (Alemania) y San Petesburgo (Rusia). Las restantes eran argentinas.

En la categoría Tango Escenario fueron 24 las parejas finalistas y solamente siete extranjeras, representando a Bogotá y Cali (Colombia), Siracusa (Italia), Tokio (Japón) y Taipei (Taiwan).

Las finales se realizaron en el salón Ocre de la Rural, donde el sábado último se consagró la pareja argentina Poberaj-Peralta, en el rubro Tango Salón.

Como corolario de la competencia artística actuaron Ariel Ardit y el Dúo Salgán-De Lío y María Nieves y Miguel Angel Zotto.

El final esperado llegó anoche con la coronación de la pareja colombiana Paredes-Rivera, en la categoría Escenario.

Como broche de oro del "mundial de los tangueros", se realizó la muestra de "El humor del tango" con la actuación y dirección de Héctor Malamud y una exquisita exhibición de Mora Godoy y Junior Cervila, quienes presentaron el espectáculo "Tangodisea".

También concluyó la milonga que acompañó al Campeonato Mundial y se transformó en un epicentro de encuentro de los tangueros de todos los boliches de la ciudad, en un hecho inédito.

Otras ediciones del Campeonato Mundial de Tango intentaron crear un espacio como esta milonga, pero nunca alcanzó el éxito de convocatoria que tuvo en esta cuarta edición.

De hecho, la concurrencia fue tan importante que muchas noches faltaron mesas y sillas y si bien hubo detalles poco cuidados cada noche cientos de asistentes de sumaron a la milonga, quienes en muy escasas invitaciones se negaron a salir a la pista y siempre mostraron un excelente clima para sumergirse en las alternativas del tango.

La pista, armada con placas de madera pintada, si bien era mucho mejor que el asfalto de la Diagonal Norte donde se bailó en el verano, tampoco era el mejor lugar para girar sobre un pie como se suele hacer en forma habitual en esta danza.

La música contó con muy buenas orquestas como Bien Frappé, los Tubatango, Yunta Tango y El Caburé, quienes mostraron un muy alto nivel y las grabaciones de Horacio Godoy, el musicalizador de La Viruta, por lo que casi no hubo errores.

El baile fue organizado con noches temáticas en las que se homenajeó a los monstruos sagrados del tango por lo que brillaron Anibal Troilo; Osvaldo Pugliese, Juan D'Arienzo; Carlos Gardel y Goyeneche, entre otros.

Fuente: Télam