Según fuentes del Pentágono los soldados buscaban al líder de un grupo rebelde chiita acusada de contrabandear armas desde Irán y de vínculos con las Fuerzas Quds, un cuerpo de elite de la Guardia Revolucionaria iraní, informó el ejército estadounidense en un comunicado.

Los milicianos habrían abierto fuego contra las tropas con fusiles y lanzagranadas. Las fuerzas terrestres pidieron apoyo aéreo cuando vieron que los combatientes se acercaban más a ellas, y al menos dos viviendas resultaron destruidas por los bombardeos.

Al menos 24 rebeldes murieron y otros 28 personas resultaron heridos en los ataques estadounidenses, ocurridos en la localidad de Khalis, unos 75 kilómetros al norte de Bagdad, dijo un vocero militar iraquí.

El portavoz señaló que algunos civiles murieron o fueron heridos en los bombardeos, pero el ejército norteamericano dijo no tener noticia sobre víctimas que no fueran combatientes.

También hoy, el ejército estadounidense anunció la muerte de uno de sus soldados durante una operación realizada ayer en el sur de Bagdad en una zona donde opera la red Al Qaeda en Irak.