Los profesores universitarios reclaman un aumento de al menos el 30 por ciento de sus sueldos. Pasada la paritaria nacional donde los maestros negociaron un piso salarial de 1290 pesos, los docentes de las universidades reclamaron al Consejo Interuniversitario Nacional –que integran los rectores– la convocatoria a la mesa de negociación salarial, de la que participará también el Ministerio de Educación. Finalmente, el 12 de marzo se reunirán para discutir los reclamos salariales de los tres gremios del sector que, con matices, pedirán mejoras similares, así como seguir “avanzando con las condiciones de medio ambiente de trabajo”, la jubilación del 82 por ciento móvil –que ya tiene media sanción parlamentaria– y la conformación de una comisión para debatir la reforma de la Ley de Educación Superior.

El pedido de llamado a la mesa donde exponer las exigencias docentes venía siendo planteado desde hace algunas semanas por los gremios, pero la respuesta oficial de Educación fue que debían esperar a que termine la paritaria de los maestros, la primera en la historia, para poder intercambiar con precisión las posibilidades sobre el pedido gremial. Pedro Sanllorenti, secretario adjunto de la Federación Nacional de Docentes Universitarios (Conadu), explicó a Página/12 que el plenario del sindicato “votó un documento con los reclamos que vamos a realizar. Nuestra postura está encaminada a conseguir para el cargo testigo (docente auxiliar con dedicación semiexclusiva) al menos los 1290 pesos acordados en la paritaria a nivel general con los docentes. Seguimos exigiendo el 30 por ciento de aumento y la recomposición del nomenclador de 1,6 por ciento, así la distancia entre un ayudante y un titular tendrá escalones del 15 por ciento”.

Parecida es la postura que llevará la Conadu Histórica, según afirmó su secretaria general, Claudia Baigorria. “La idea es arrancar en 1400 pesos de básico, en blanco y con aportes. De lo que estamos seguros es que no puede haber un piso inferior a 1290 pesos para los cargos testigo, porque en la actualidad están cobrando 934 pesos.” Mientras, desde la Federación Docente de las Universidades (Fedun) –sindicato que realizará su congreso nacional hoy y mañana en Carlos Paz–, Daniel Ricci aseguró que, además de las demandas porcentuales, plantearán en la mesa que el “incentivo para docentes e investigadores, que se cobra en negro, pase a formar parte del sueldo”.

Donde aparecen los matices es en algunas propuestas para crear adicionales. Ricci anticipó que “existe un acuerdo firmado en paritarias el año pasado por un plus por especialización en posgrados y doctorados, y vamos a plantear que se ponga en práctica”. Si bien la Conadu está de acuerdo, propone que “primero hay que lograr que evolucione el nomenclador, que beneficiaría a la mayor parte de los docentes y, luego, avanzar en el reclamo de un adicional por título de posgrado”, dijo Sanllorenti. Para Baigorria, “también hay que garantizar el presupuesto para los docentes ad honorem, porque ese tema todavía no está resuelto y debe tener prioridad”.

No todos los reclamos estarán relacionados con la problemática salarial. Además de la conformación de una comisión con todos los representantes del sector para debatir un proyecto de Ley de Educación Superior conjunto, se abordarán las condiciones laborales y el medio ambiente de trabajo. El tema pasó a ser una prioridad después de la explosión de tambores con gas hexano en la Universidad Nacional de Río Cuarto, el año pasado, donde murieron cinco docentes e investigadores y un estudiante. Los tres gremios participan de la comisión que formó el consejo de rectores (CIN) para tratar el tema.

En diálogo con este diario, el secretario de Políticas Universitarias del ministerio, Alberto Dibbern, aseguró que en la reunión se iban a “sentar a escuchar las demandas de los gremios. Sabemos que esto no es una negociación que se resuelve en un día. Por supuesto que las posibilidades para otorgar un aumento existen, pero vamos a escuchar la postura de los docentes para intentar llegar a un acuerdo”. Sobre la cuestión de las condiciones laborales, Dibbern destacó que “ya se está trabajando. Existe un programa que se está ejecutando y también trabajamos en la comisión que creó el CIN para tratar el tema”.