La Universidad de Buenos Aires puso en marcha ayer el Programa de Derechos Humanos, que apuntará a que todos los alumnos cursen antes de graduarse un seminario obligatorio de 36 horas de contenidos sobre el tema, siempre relacionados con su carrera. En la primera conferencia del programa, el rector de la UBA, Rubén Hallú, estuvo acompañado en la mesa por Adolfo Pérez Esquivel, Premio Nobel de la Paz, y por el ex juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) Pedro Nikken, quienes expusieron sobre la premisa “porque alfabetizar en la UBA también es enseñar y aprender derechos humanos”.

La ex vicedecana de la Facultad de Derecho Mónica Pinto será la directora encargada del programa. Pinto es abogada y profesora titular de Derechos Humanos y Garantías, también tiene una gran experiencia internacional en el tema, ya que fue experta independiente para el examen de la situación de estos derechos en Guatemala y en Chad.

En diálogo con Página/12, explicó que “el objetivo explícito del programa es que los estudiantes de la UBA, antes de graduarse, tengan que acreditar algunas horas de educación en derechos humanos como parte de su plan de estudios”. Para Pinto, “la idea es básicamente trabajar con profesores, graduados y estudiantes para poder lograrlo, a la luz de la fisonomía de las carreras que se dictan y de las modalidades que tengan”. En principio, se estima que la concreción de este propósito llevará aproximadamente “dos años, por todos los pasos administrativos que tiene que transitar cada unidad académica”.

Con el respaldo de los representantes de casi todas las facultades de la UBA, presentes ayer en la sala de conferencias de Farmacia y Bioquímica, fue Pérez Esquivel quien comenzó con el acto después de la presentación de la periodista de este diario, Nora Veiras, moderadora de la mesa. El titular del Servicio de Paz y Justicia (Serpaj) destacó que era “fundamental que la UBA pueda llevar al pensamiento crítico la enseñanza de los derechos humanos”. Y aprovechó para enviarle un mensaje al ganador de las últimas elecciones para jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri. “El próximo supremo de la ciudad dijo que el siglo XX fue el de los derechos humanos. Pero los derechos humanos son de la vida cotidiana”, apuntó Pérez Esquivel, y agregó que estas iniciativas habría que “llevarlas a las Fuerzas Armadas y a la policía”.

El jurista venezolano Pedro Nikken, que integró el tribunal de la CIDH, detalló que fue poco antes de comenzar el siglo XX que apareció la problemática, pero “a partir de grandes sufrimientos del ser humano, como la Revolución mexicana, fue que estalló el tema de los derechos humanos”. Después de relatar que “el gran problema es que con las sentencias de las cortes todavía no se pudo penetrar en los sistemas para prevenir y condenar” la violación de estos derechos, el especialista observó que “impregnar la enseñanza universitaria de derechos humanos puede marcar una experiencia a ser imitada en casas de estudio en nuestra región y en otras partes del mundo”.

La cuestión de los derechos humanos tiene tratamiento en distintas facultades desde hace años. Por caso, Derechos humanos y garantías es materia obligatoria para los estudiantes de Abogacía, y Psicología, ética y derechos humanos para los de Psicología. También existen cátedras libres que tratan el tema, como la de la Madre de Plaza de Mayo, Nora Cortiñas, presente en el acto. Sobre esto, Pinto destacó que “la militancia en derechos humanos es una constante en todas las facultades, a lo que apuntamos es a que esa militancia contribuya a formar el currículum académico. Hay un núcleo central con el que se pretende formar ciudadanía, y hay otra parte que pretendemos que decida cada facultad, con cursos facultativos o de posgrado para que trabajen sobre aquellos derechos humanos que están más cerca del área de incumbencia, por ejemplo los médicos derecho a la salud, para los arquitectos derecho a la vivienda, para los biólogos derecho al medio ambiente”.

El programa lanzado ayer establece un cronograma de actividades de sensibilización, del que la conferencia fue la primera. La directora explicó que “en el próximo semestre vamos a seguir con las conferencias y actividades, en donde se va a trabajar un modelo de Naciones Unidas en temas de derechos humanos, para todas las facultades de la UBA. Lo más importante es generar una activa participación de los estudiantes con actividades de debate, porque asumirse como el otro es uno de los primeros pasos para empezar a comprender los derechos humanos”.