Juan Mónaco debutó con éxito en el Abierto de Estados Unidos, donde su compatriota Horacio Zeballos fue eliminado. Juan Ignacio Chela y David Nalbandian debutarán hoy en el último Grand Slam del año. El cordobés hará su presentación alrededor de las 18 contra Bobby Reynolds, mientras que el bonaerense juega cerca de las 15 contra el australiano Marinko Matosevic. A la misma hora, Carlos Berlocq se mide contra el español Pere Riba y, además, Gisela Dulko debuta a mediodía contra la canadiense Rebeca Marino.

Mónaco se impuso al italiano Andreas Seppi 7-6 (7-1), 6-2, 6-2 y se medirá con el checo Radek Stepanek, que venció 6-4, 6-1, 6-3 al alemán Philipp Kohlschreiber.

Zeballos, en cambio, cayó ante el italiano Fabio Fognini 5-7, 6-4, 7-6 (7-5), 6-4 en un partido en el que dispuso de una ventaja de 3-1, su saque y 40-15 en el tercer parcial. “Tuve mis chances, no las supe aprovechar cuando estaba 3-1. Los nervios me jugaron en contra, también en el tie-break del tercer set, donde hice más errores que él.”

Zeballos lanzó un mensaje al capitán del equipo de Copa Davis, Modesto “Tito” Vázquez, de cara a la semifinal de dentro de dos semanas ante Serbia. “El capitán sabe lo que juego en el dobles, creo que lo dejé claro el año pasado acá, con las semifinales junto a Schwank.”

A Zeballos le molesta la “incertidumbre” que hay en cuanto a la designación del equipo. “Hay un poco de incertidumbre, porque siempre esperan a último momento para designar el equipo.”

El argentino espera aún que se confirme la presencia de Juan Martín Del Potro y Nalbandian, las dos figuras del equipo argentino. “Si tenemos a Del Potro y a Nalbandian juntos, por supuesto que va a ser potable. Pero va a ser muy difícil...”

Juan Martín Del Potro debutará recién mañana ante el italiano Filippo Volandri. Dos años atrás, se convirtió en el primer argentino en ganar un Abierto de Estados Unidos, desde que Guillermo Vilas lo hiciera en 1977. El tandilense, 18º preclasificado, quiere dejar atrás 24 meses de frustraciones por lesiones e inestabilidad emocional, y volver a descollar en Flushing Meadows, donde saltó a la fama mundial en 2009, tras dejar en el camino a estrellas como el español Rafael Nadal y el suizo Roger Federer.

“Si no es este año, puede ser el siguiente o el otro. Sólo jugar este torneo otra vez será bueno para mí”, aseguró Del Potro. “Los favoritos son los cuatro más importantes del mundo. Tenemos un nuevo número uno y que es el candidato fuerte. Yo creo en mis posibilidades, pero soy realista y pienso que todavía estoy un poco lejos de ellos, a pesar de que me estoy acercando cada día más. Tal vez pueda ser una sorpresa este año”, acotó.

Del Potro regresa a Flushing Meadows con dos títulos este año en su archivo: el de Estoril (Portugal), sobre polvo de ladrillo, y el de Delray Beach (Florida), en canchas rápidas. “Si usted quiere ganar un Gran Slam tiene que jugar su mejor tenis, al nivel de un top 10 durante dos semanas –afirmó–. No sé si estoy en esa condición este año, pero haré el intento.”

Del Potro tiene además las semifinales del Masters 1000 de Indian Wells, donde fue vencido por Nadal con un doble 6-4. “Poco a poco voy reencontrando mi tenis. No ha sido fácil el camino después de la lesión, pero creo haber dejado todo eso atrás”, apuntó.