El seleccionado argentino de fútbol Sub-17 venció ayer por 2-1 al de Costa de Marfil y se clasificó a las semifinales del Mundial de la categoría que se disputa en los Emiratos Arabes Unidos, instancia en la que el próximo martes enfrentará a México, el último campeón. Los goles del conjunto nacional los anotaron Joaquín Ibáñez, a los cinco minutos, y Rodrigo Moreira, a los 32; mientras que Franck Kessie, de penal, descontó para los africanos a los 77.

Los juveniles argentinos fueron superiores durante la etapa inicial y marcaron diferencias desde el comienzo mismo del partido. Fue a los cinco minutos cuando Matías Sánchez envió un centro preciso desde la derecha que sobró a los centrales marfileños, y la pelota le quedó servida a Ibáñez. El defensor de Lanús, que estaba en posición de ataque, bajó la pelota de pecho y definió cruzado para el 1-0.

Con el correr de los minutos, el juego se fue emparejando, aunque Argentina amplió la ventaja a los ’32, tras un corner ejecutado desde la derecha por Leandro Vega. La pelota no fue despejada por la defensa africana tras un pique y por el segundo palo ingresó Moreira, quien la punteó al gol.

En el complemento, la fricción impuesta por el equipo marfileño fue llevando a los argentinos contra su área. Fue entonces cuando el árbitro alemán Wolfgang Stark cobró un discutible penal tras una mano de Vega dentro del área, a los 76 minutos. Kessie, el capitán marfileño, se hizo cargo del disparo y cruzó su remate ante la estéril respuesta del arquero argentino, Augusto Batalla, para el 2-1.

El próximo martes el conjunto argentino intentará llegar a la final del torneo en Abu Dhabi cuando se mida ante México, que llegará entonado tras vencer a Brasil en la definición por penales 11-10, tras igualar 1-1 en el tiempo regular.

El entrenador del equipo argentino, Humberto Grondona –hijo del mandamás de la AFA–, se mostró feliz por el resultado, pero aclaró que al Sub-17 todavía le falta mejorar para alcanzar el rendimiento óptimo y el objetivo del título. “Estamos contentos pero todavía sabemos que nos falta más. Nos ha tocado jugar con selecciones muy complicadas en este Mundial, pero sin dudas este partido ha sido el más difícil de todos”, señaló, y agregó: “Sabíamos que podíamos aprovechar la táctica fija de ellos. También teníamos en claro que en ofensiva eran complicados. El segundo tiempo se dio con un equipo buscando y otro queriendo contrarrestar”.

Por último, consultado sobre México, el próximo rival, el entrenador manifestó: “De México hablaré el día previo al partido. Pero no hay que olvidarse que es el último campeón. Tiene grandes jugadores. Siento algo muy especial por México, un afecto grande por haber trabajado allí tanto tiempo”.