El ATP de Buenos Aires recibió ayer una muy dura noticia al anunciarse que en 2015 el certamen fue incluido en la octava semana de competencia, junto a los ATP 500 de Dubai y Acapulco. De esta manera, el certamen que se lleva a cabo de manera ininterrumpida desde 2001 tendrá menos chances de contar con los mejores tenistas del ranking mundial. Para la última edición estuvo anunciada la presencia del número uno del mundo, el español Rafael Nadal, aunque luego no participó por una molestia en su espalda.

En su sitio oficial, la ATP publicó una actualización del calendario 2015, en el que señaló que el torneo de San Pablo se disputará en la semana 6 y el de Buenos Aires en la semana 8. De esta forma, el ATP 250 de Buenos Aires se jugará en la semana del 23 de febrero al 1º de marzo, la misma fecha en que se disputarán los ATP 500 de Dubai y Acapulco. Por lo mismo, el director ejecutivo y presidente de la ATP, Chris Kermode, señaló que la decisión “es por un año y ya se están desarrollando reuniones para 2016 y más allá, en la confección del calendario”.

La determinación oficializada ayer es un golpe muy duro para el futuro del certamen porteño, ya que al compartir semana con dos torneos de la categoría ATP 500, los mejores jugadores seguramente elegirán competir en Dubai o Acapulco, que se juegan sobre cemento, justo previo al comienzo de Indian Wells. Por caso, la posibilidad frustrada de este año de ver en Buenos Aires a Rafael Nadal difícilmente se saldará en la próxima edición, ya que el número uno del mundo, al igual que el campeón David Ferrer (foto) o el otro finalista Fabio Fognini, priorizarán los torneos que entregan más puntos y más dinero.