Juan Mónaco mostró ayer muy buen tenis y un excelente estado anímico para superar por 6-3, 7-6 (7-4) al holandés Robin Haase en la semifinal del ATP 250 de Gstaad, Suiza, por lo que hoy buscará el noveno título de su carrera al enfrentar desde las 6.30, por la final del certamen, al español Pablo Andújar, 71 del ranking de la ATP, que ayer eliminó a su compatriota Fernando Verdasco (38) 6-3, 6-7 (2), 6-1. “Es una gran satisfacción porque sé lo que vengo haciendo para lograr esto. No quiero soltar este ritmo de nuevo. Este es el comienzo del camino para lograr lo que estaba haciendo en los años anteriores”, comentó Mónaco (105) luego de la victoria sobre el holandés Haas (51º), tercera que registra luego de vencerlo en Miami 2007 e Indian Wells 2008.

Mónaco, quien jugará su primera final desde que cayera frente al catalán Marcel Granollers el año pasado en Kitzbühel, comenzó el partido de ayer errático, por lo que rápidamente quedó en desventaja 3-0 tras ceder su saque para 02, pero mostró capacidad de reacción y con un tenis agresivo y tiros profundos ganó seis juegos consecutivos y se llevó el primer set por 6-3 en poco más de media hora.

En el segundo set, el tandilense también comenzó abajo 2-0 tras el quiebre del holandés, que venía con el ánimo alto tras haber dejado en el camino al ruso Mikhail Youzhny (19º), máximo favorito al título y campeón defensor. Pero rápidamente Mónaco pudo empatar y pasar al frente con mucha fortaleza anímica para forzar el tie break, donde no vaciló: sacó rápido una ventaja de 6-1 y definió cómodo, lo que desató su festejo con el puño cerrado y el regreso de las buenas sensaciones que le permitieron llegar al top ten hace dos años, cuando ocupó el décimo escalón del ranking de la ATP en julio de 2012.

“Mi esencia es volver a pelear, volver a sacrificarme. Hace un tiempo que lo vengo haciendo y por suerte ahora se están dando los resultados”, explicó el tandilense, de 30 años, después de la victoria que le permitirá volver a estar entre los mejores 100 del ranking, límite que sobrepasó la semana pasada por primera vez en ocho años. Con los puntos ya ganados se ubicará entre el puesto 88 y 90 y podría subir unas siete posiciones más si finalmente levanta el trofeo suizo.

“Fue muy duro”, afirmó Mónaco sobre su vuelta a la definición de un torneo luego de una larga inactividad, y agregó: “Después de Tokio estuve dos meses afuera. Cuando no podés jugar es difícil, así que estoy feliz de poder volver a hacerlo. Me siento bien de salud, mis condiciones físicas están bien. Necesito sumar más horas en pista para que las victorias lleguen”, concluyó de cara al enfrentamiento con el español Andújar.

En el caso de alzar el trofeo, sería el quinto título del año para el tenis argentino, contando los triunfos de Juan Martín Del Potro en Sydney; Federico Delbonis en San Pablo; Carlos Berlocq en Oeiras, Portugal, y el de Leonardo Mayer el domingo pasado, en Hamburgo. En cuanto al ATP de Gstaad, forma parte de la última gira sobre polvo de ladrillo en Europa (que concluirá esta semana con el torneo de Kitzbühel, en Austria) y en su historia tuvo como campeones argentinos a Guillermo Vilas (1974 y 1978), José Luis Clerc (1982), Martín Jaite (1990) y Gastón Gaudio (2005).