López conduce por el trazado alemán con total autoridad.

La que escribió ayer, a golpes de volante y acelerador, el cordobés José María López en el Nürburgring, el circuito más difícil y peligroso del mundo, será considerada, con el tiempo, una de las páginas más brillantes del automovilismo argentino en el exterior. En otra de las impecables performances que viene protagonizando en 2015, el campeón mundial de autos de Turismo ganó la primera carrera por una diferencia sustancial, su cuarto triunfo de la temporada, y perdió por apenas 176 milésimas la segunda prueba, en la que largó desde la décima posición. Como resultado, estiró su ventaja en el Mundial y nadie duda ya de que, aún a ocho fechas del final del certamen, retendrá la corona que ganó el año pasado.

Cuando se repasen las grandes victorias argentinas en el Nürburgring, esta actuación del piloto de Río Tercero compartirá cartel con los triunfos de Juan Manuel Fangio en 1957 y de Carlos Reutemann en 1975. López es claramente el mejor piloto del Mundial de Turismo (WTCC) y estaba determinado a conseguir un triunfo histórico, que logró con velocidad y concentración. En la primera carrera superó por casi cinco segundos a uno de sus compañeros de equipo, el múltiple campeón de rally Sebastian Loeb, enhebrando a la perfección las casi 200 curvas del trazado de más de 25 kilómetros, que recorrió en tres oportunidades. “En un momento vi a Pechito con las cuatro ruedas en el aire, lo que es muy extraño en carreras de pista”, señaló el francés para graficar la velocidad del argentino. “Intenté atacarlo pero nunca pude acercarme”, dijo poniendo de manifiesto su frustración. Yvan Muller, que vencería la segunda carrera, completó el podio.

La formidable velocidad del Citroen C-Elysee que maneja el cordobés le permitió capturar dos posiciones en el tramo final de la segunda prueba, tal como se había anticipado ayer aquí, sobre los Honda de Tiago Monteiro y Gabriele Tarquini, para terminar a la cola del auto de Muller, apenas 173 milésimas por detrás; el francés había partido seis posiciones delante del argentino (cuarto y décimo, respectivamente) y, sin embargo, estuvo a punto de ser cazado.

“Todos los pilotos quieren ganar en esta pista, ¡pero yo lo quería más que ninguno!”, afirmó López tras el doble podio. “Tuve una buena largada en la primera carrera y pude escaparme. En la segunda, creí que solo iba a poder pasar uno de los dos Honda, pero lo conseguí con ambos.” El cordobés le sacó 50 puntos de ventaja a Loeb y 51 a Muller pero lo más importante es que ninguno de sus rivales piensa ya que puede derrotarlo.

En Oberá, Matías Rossi (Toyota) marcó el mejor tiempo para la tercera carrera del año del SuperTC2000 que se disputa hoy desde las 12.30 (televisa Canal 13).