Juan Martín Nero, Pablo Mac Donough, David Stirling y Adolfo Cambiaso levantan la copa.
Imagen: Matias Callejo / AAP.

El polo inició una nueva era y el equipo de La Dolfina se encargó de marcar a fuego la historia. El conjunto de Cañuelas se convirtió ayer en el primero que obtiene la Triple Corona por tercer año consecutivo, algo inédito para esta actividad. El torneo que le faltaba, al Argentino Abierto, lo alcanzó en la Catedral de Palermo derrotando 13-12 a Ellerstina, y suma así 33 encuentros sin perder y nueve campeonatos seguidos. El último traspié fue la final de Palermo 2012, ante el mismo rival de ayer. Con este nuevo logro, superó al legendario Coronel Suárez, de los Harriot y los Heguy, que si bien ganaron cuatro veces los tres torneos (con Tortugas y Hurlingham) más importantes, nunca lo hizo de manera seguida. La Dolfina se ubicó ahora como el tercer equipo más ganador en Palermo, con nueve títulos, detrás de Coronel Suárez (26) y North Santa Fe (16).

La final de ayer tuvo como máxima figura al defensor Juan Martín Nero, que jugó a un nivel muy alto, y aportó toda su experiencia para el plantel que lidera Adolfo Cambiaso. Precisamente, el delantero marcó seis goles para quedar como el máximo de la tarde, junto a Facundo Pieres, en ese rubro. Este fue la 12ª vez que Cambiaso juega el Abierto Argentino, y el equipo que creó en 2011 ganó 19 de los 20 partidos que disputaron en la cancha número uno. La única derrota fue aquélla de 2012.

La ventaja para La Dolfina apareció en el segundo chukker, donde marcó tres goles contra ninguno de su rival. Con el resultado 5-2 a su favor, fue inteligente para controlar el desarrollo y mantener la diferencia. Ellerstina se apoyaba en lo que podía ofrecer Facundo Pieres, el más destacado del perdedor, para descontar la distancia. El equipo de General Rodríguez jugó un gran séptimo chukker, que se lo terminó llevando 3-1, y finalizó ese parcial dos goles abajo (12-10), después de estar a cinco.

El último chukker fue electrizante. Ellerstina marcó a través de Pablo Pieres para quedar a uno, pero Cambiaso no falló en un penal de 40 yardas para volver a sacar dos de ventaja. El perdedor volvió a acercarse a través de Facundo, y el nerviosismo fue mayor, en un duelo que estuvo acompañado por la lluvia durante gran parte.

La hazaña no llegó para Ellerstina, y el campeón impuso su capacidad para hacer correr el reloj con la bocha lejos de sus mimbres. La campana final mostró a los integrantes del campeón mirando el cielo gris para agradecer por tanta gloria acumulada, mientras los Pieres le reclamaban a los árbitros por cierta disconformidad en algunos fallos.

“No se puede creer, nunca jugué con tanta presión en mi vida. A mí me gusta la presión, así que estoy contento. Creo que el último chukker lo jugamos pensando en eso”, destacó Cambiaso luego del partido.

El palenque de La Dolfina desbordaba de alegría, con la presencia infaltable del cordobés David Nalbandian en el medio. El también había sido parte de un hito que ya quedó en los anales del polo. El mejor equipo del mundo lo había hecho posible otra vez. Cañuelas sigue delirando por haber llegado a la cima, y pretende seguir en ese sitio.

Los equipos: 13 La Dolfina: Cambiaso (10 de handicap), Stirling (10), Mac Donough (10), Nero (10). 12 Ellerstina: Pablo Pieres (10), Nicolás Pieres (9), Gonzalo Pieres (10), Facundo Pieres (10). Progresión: La Dolfina: 2-2, 5-2, 7-3, 8-4, 9-6, 11-7, 12-10, 13-12. Cancha: Número 1 de Palermo.Jueces: Ferrari y Appleby. Arbitro Boudou.