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David Nalbandian sonrió. El cordobés fue el único argentino con algo que celebrar ayer en el US Open, al clasificarse para la segunda ronda pese a sus problemas físicos, en una jornada en la que Juan Ignacio Chela y Gisela Dulko hicieron las valijas.
Nalbandian eliminó al holandés Dennis van Scheppingen 6-4, 7-6 (7-5), 6-3. Pero lo bueno fue que volvieron las mejores sensaciones tras el desgarro que sufrió en los isquiotibiales y que le impidió jugar en Atenas. “Pensé que iba a estar mucho peor, pero me sentí bien”, admitió. “Todavía me cuesta sentirme completamente cómodo en los desplazamientos, pero me falta entrenarme y jugar más”, agregó el cordobés, que sólo pudo disputar un partido desde Roland Garros.
“Ni sintiéndome en la mejor forma se puede decir adónde llegaré. Lo cierto es que siempre respondí en los momentos difíciles, y de a poco me voy sintiendo mejor.” El cordobés se enfrentará en segunda ronda al ruso Mijail Youzhny.
Peor les fue a Chela y a Dulko. Chela levantó dos sets en contra y batalló durante más de tres horas para acabar entregando el partido de primera ronda al brasileño Ricardo Mello 6-2, 7-6 (7-1), 2-6, 2-6, 6-2. Dulko terminó su participación al caer en segunda ronda ante la japonesa Ai Sugiyama 6-2, 6-4. La joven argentina se defendió con bravura ante una rival mucho más experimentada, en un partido que apenas superó la hora de duración. Gastón Gaudio juega hoy su partido de segunda ronda ante el sueco Thomas Johansson, a las 12.