Juan Mónaco y Gisela Dulko fueron los únicos sobrevivientes del naufragio que sufrió el tenis argentino en la segunda ronda de Roland Garros, que se llevó por delante a Juan Ignacio Chela, Carlos Berlocq, Sergio Roitman, Edgardo Massa y Clarisa Fernández. A la fría jornada que se vivió en París sólo se adaptaron Mónaco, acostumbrado al duro clima de Tandil, y Dulko, que produjo un derroche de esfuerzo que duró dos horas y 45 minutos. Se sumaron a los cuatro que alcanzaron ya la segunda fase: los favoritos David Nalbandian (3), Gastón Gaudio (10) y José Acasuso (26) y el sorprendente Martín Vassallo Argüello, procedente de la fase previa. Nalbandian jugará hoy frente al francés Richard Gasquet, de 19 años, en el court central, mientras que Gaudio se las verá con el ruso Evgeny Korolev y Vassallo Argüello se medirá con Sebastien Grosjean.

Mónaco se medía al holandés Melle Van Gemerden, un jugador de esos que se basan en los saques y las voleas y que le intimidó de entrada, pero le dio menos problemas a medida que se intercambiaron raquetazos. Al final se impuso 6-3, 6-2, 6-4 y dejó buenas sensaciones en la cancha, hasta el punto de que afirmó haberse sentido “ganador”.

“En los últimos meses tuve que cambiar mi actitud porque tenía mucha inestabilidad. Cuando perdés, todo es difícil, pero ahora todo ha cambiado, ahora vuelvo a tener una actitud ganadora”, dijo el jugador, que desde hace unos torneos ya no es pupilo de Eduardo Infantino.

Su confianza va en aumento y no teme a su próximo rival, el español Fernando Verdasco, favorito número 28, porque asegura que se le dan bien los zurdos. Es su último obstáculo para alcanzar por primera vez la tercera ronda de un grande.

Dulko se dejó sorprender por la ucraniana Yulia Beygelzimer, 138a del mundo, una jugadora procedente de la fase previa contra la que tuvo que apelar a la épica para ganar un partido que parecía bien encarrilado tras el primer set. La bonaerense, cabeza de serie número 32, alargó el encuentro para imponerse 6-3, 2-6, 11-9, su cuarta victoria en Roland Garros en su carrera. “Ahora mismo no tengo mucha confianza en mi juego, y por eso tengo que luchar más. En otro momento el partido de hoy (por ayer) lo habría ganado con más facilidad”, indicó.

Su próxima rival será otra ucraniana, Yuliana Fedak, 84 del mundo, que se deshizo sin apuros de la portorriqueña Kritina Brandi por 6-2, 6-3. Ya jugaron el año pasado en Wimbledon, donde la argentina se impuso con facilidad. “Pero éste será otro partido, porque aquélla no es su superficie”, avisó.

La trabajada victoria de Dulko arregló una jornada en la que pintaba mal. Chela había caído ante el español Fernando Verdasco, cabeza de serie 28, por 6-1, 6-3, 6-7(6), 6-4, que ya lo había derrotado recientemente en Hamburgo. Chela no está fino, sólo ha ganado uno de sus últimos cinco partidos y su juego está lejos de lo de otros años, como cuando alcanzó los cuartos de Roland Garros en 2004.

“Verdasco fue muy superior durante todo el partido. Jugar contra un zurdo siempre es mucho más complicado. Es muy potente y está en un gran momento –señaló Chela–. Los dos primeros sets no me sentí en la cancha, en el tercero levanté el rendimiento, pero las continuas interrupciones por la lluvia y el viento me jugaron en contra y nada pude hacer para revertir el resultado.”

“No me llevo nada positivo. No venía bien en toda la gira de polvo de ladrillo batida y esperaba rendir más aquí. Creo que tengo un problema de confianza. Cuando tenés un buen momento ganás partidos sin pensarlo, pero ahora es un mal momento”, comentó.

Menos sorprendentes fueron las derrotas de Berlocq, Roitman y Massa. A punto estuvo de dar la sorpresa Roitman, que forzó cinco sets ante el eslovaco Dominik Hrbaty, favorito 22, antes de caer por 6-4, 6-2, 3-6, 26, 6-3 en un duro partido.

Roitman, que había estado ausente en las dos pasadas ediciones de Roland Garros, volvió a caer en primera ronda, como ya le sucedió en 2003. En su debut en Roland Garros, a Berlocq le pasó por encima el buen momento del croata Ivan Ljubicic, cuarto favorito, que apenas si dio opciones al argentino y lo derrotó 6-2, 6-0, 6-3.

“Aquí se juega a una velocidad más rápida”, confesó Berlocq al término del partido, al tiempo que reconoció que le falta confianza para afrontar este tipo de partidos, sobre todo contra rivales de tan alto nivel.

Por segundo año acudía a París Massa, pero tampoco logró pasar de ronda. Lo derrotó el belga Dick Norman, otro jugador procedente de la fase previa, que le ganó 6-1, 6-3, 6-3. El argentino aseguró que tuvo problemas en el hombro por la dureza de la fase previa.

Clarisa Fernández dejó a Dulko sola en el cuadro femenino, tras perder frente a la francesa Emilie Loit por 1-6, 6-2, 6-3. Tras su larga ausencia de las pistas obligada por las lesiones, Fernández afirmó que precisa más tiempo para recuperar su tenis.