El Consejo Superior de la UBA intentará sesionar esta mañana para elegir un vicerrector, que sería Aníbal Franco. Pero antes deberá superar un tema delicado y decidir si sanciona o no a los dirigentes no docentes que golpearon a estudiantes en aquella pelea sobre las escalinatas de la Facultad de Medicina, ocurrida a principios de mes. Para exigir la separación de los involucrados –que tienen fueros gremiales–, se movilizarán las agrupaciones estudiantiles de izquierda que conducen la FUBA. El resultado de la sesión de hoy puede ser clave para el futuro de la universidad, inmersa en una profunda crisis y sin autoridades electas, a un paso de la acefalía.

Tras la renuncia del decano de Medicina, Alfredo Buzzi, a su interinato en el rectorado, ayer asumió el despacho de la universidad Alberto Boveris, el decano de Farmacia y Bioquímica. Por edad, le correspondía al decano de Derecho, Atilio Alterini, pero declinó hacerlo.

“Espero que todos los sectores vengan (a participar hoy de la sesión), voten y, cumpliendo con el orden del día, podamos elegir un vicerrector”, dijo ayer Boveris (ver aparte) y se manifestó esperanzado de que “en el lapso de cuatro semanas se elija rector para poner en marcha un cronograma de actualización de estatutos, que es el reclamo del movimiento estudiantil”. Hasta fines de marzo pasado Boveris fue candidato a rector, apoyado por parte del radicalismo universitario, pero bajó su candidatura en favor de la de Alterini, finalmente frustrada. En los últimos días, su nombre se mencionó como posible nuevo candidato del bloque mayoritario que forman radicales, peronistas y otros aliados.

Hoy, el Consejo Superior debe tratar un temario con tres puntos, consensuado por los consejeros del bloque de mayoría, el espacio de izquierda y centroizquierda, y demás minorías, con excepción de la izquierda estudiantil. Tal como ocurrió hace dos semanas, cuando la sesión terminó suspendida por el tenor de la protesta, la FUBA se hará presente: “Vamos a movilizarnos para pedir la real separación de la patota que golpeó a los estudiantes el 2 de mayo pasado, la reforma de los estatutos y la convocatoria a un plebiscito para que se exprese toda la comunidad universitaria”, anunció Juan Pablo Rodríguez, copresidente de la federación. Agustín Vanella, consejero estudiantil, consideró “un atropello y un despropósito” que sesione el Consejo, “cuando todavía no está resuelto el desafuero gremial para la patota no docente”.

El primer punto a tratar en la sesión es el que se refiere a los gremialistas de Apuba: “Información y consideración del estado de los sumarios abiertos en relación con los hechos de violencia ocurridos en esta universidad”, dice la convocatoria. El acuerdo con la minoría estudiantil de izquierda no será sencillo, porque, como los trabajadores implicados tienen fueros, ante de separarlos –sostienen las autoridades– debería hacerse una presentación judicial sustentada en los sumarios ya concluidos. Ante ese argumento, los alumnos piden una sanción provisoria o alguna salida política. Por ahí transitará la discusión central.

El segundo punto del temario es el siguiente: “Constitución de una comisión a efectos de recibir los proyectos de reforma del estatuto universitario”. En este caso no parece haber conflicto, por ahora. El consenso respecto de la necesidad de modificar las normas vigentes es general. Las diferencias se plantearán cuando se abra la discusión y cuando la FUBA insista en que el próximo rector sea elegido después de la reforma y tras la renuncia y nueva elección de todos los decanos y consejeros. La mayoría del Consejo Superior cree que cualquier reforma debe regir a partir de un próximo período.

Si se sobrellevan los primeros, el último punto a tratar hoy es la designación de un vicerrector. El principal candidato es Aníbal Franco, peronista, ex decano de Veterinarias y actual consejero profesor. La idea del bloque mayoritario es que sea él quien gobierne la transición hasta que se pueda reunir la asamblea –suspendida cuatro veces en abril– para elegir al nuevo rector de la UBA. ¿Qué pasará si la sesión vuelve a complicarse? Algunos consejeros y el mismo Boveris pensaban ayer que la reunión podría pasar a cuarto intermedio hasta que se den las condiciones para proseguir.