La selección de Serbia y Montenegro llegó al Mundial, y especialmente al partido de hoy, inmersa en una innumerable cantidad de conflictos, tanto futbolísticos como ajenos al juego. Desde el referéndum que determinó que Montenegro lograra su independencia a menos de tres semanas del comienzo del torneo y la aceptación ayer de esa medida por parte de Serbia (ver página 20), hasta las críticas de los jugadores al entrenador Ivica Petkovic por la táctica empleada ante Holanda, los balcánicos atravesaron varias dificultades. Para colmo, en el debut mostraron muy poco juego y perdieron, por lo que una nueva derrota los dejaría fuera del Mundial. “Hay como una onda negativa que nos persigue”, remarcó el vocero de la selección, Aleksandar Boskovic.

“Vamos a ser los mejores embajadores de nuestro país”, dijo Mateja Kezman, una de las figuras del equipo, antes del inicio del certamen. Pero más allá de sus palabras, a los serbomontenegrinos nada les sale como suponían. Todo comenzó con la lesión del delantero Mirko Vucinic, el único montenegrino del plantel, que se quedó afuera.

Para colmo, la relación entre el técnico y el grupo se puso más tirante todavía luego del partido ante Holanda. Petkovic dejó fuera del equipo al volante Ognjen Koroman a último momento, pero ya con el partido 0-1, el mediocampista ingresó antes del final del primer tiempo. “Con un planteo tan cobarde, ante Argentina no tenemos chances”, disparó Koroman tras el juego y aseguró que varios compañeros opinaban lo mismo. Encima, no cayó bien que Kezman y Milosevic, los dos jugadores emblema, hayan salido mucho antes del final del partido y que se comente que tal vez uno o los dos no jueguen. “Las fisuras son visibles en el seno de la selección tras años de hablarse de la unidad y amistad dentro del equipo”, informó la agencia de noticias serbia Tanjug.

Tampoco faltaron las lesiones, como para complicar más aún el panorama. El central Nemenja Vidic ya se despidió del torneo por una lesión en la rodilla, mientras que el lateral Ivica Drgutinovic también sufrió un golpe que lo marginaría del compromiso ante Argentina. De todas formas, José Pekerman no se confía: “Son un rival a tener en cuenta, con orden defensivo, buenos ejecutantes con pelota parada y jugadores de muy buena contextura física. Juegan mucho por las bandas y desde allí buscan a sus delanteros”.