Nadie parece poder interponerse entre Juan Mónaco y su primer título. El tandilense derrotó 6-1, 7-6 (3) al español Nicolás Almagro, se clasificó a la final de la Copa Telmex y se enfrentará esta tarde, desde las 14.30 (televisan TyC Sports y Canal 9), ante el italiano Alessio Di Mauro, quien superó en la otra llave 6-1, 6-4 al misionero Diego Hartfield. “Va a ser el partido más importante de mi vida. Pero no me tengo que desesperar. Todavía no gané nada. Falta una batalla más”, aseguró Mónaco.

Fue una final anticipada. La partida de los máximos preclasificados dejó desierta de figuras la parte baja del cuadro. En el sector de arriba, fue Mónaco (66º) quien barrió en el camino a varios de los favoritos. Primero fueron Carlos Moyá y Luis Horna. Ayer fue el turno de Almagro y el tandilense lo superó con un sólido rendimiento como argumento principal. De entrada, fue el argentino el que dio el primer golpe: quebró en el segundo y sexto juego ante un rival muy errático y se llevó el primer parcial por un contundente 6-1.

Desde el arranque del segundo set, el español sacó a relucir destellos de su mejor repertorio: su saque comenzó a lastimar y su revés desequilibraba al argentino. Incluso, Almagro se ganó varios silbidos cuando le dedicó un punto a un grupo de eufóricos hinchas y amigos de Mónaco, agrupados en un rincón del estadio. El argentino logró levantar cada uno de los break point que generó el español (Mónaco nunca cedió su saque) y estiró el set hasta el tie-break.

Allí, el público asumió el protagonismo. “Olé, olé, olé, olé, Pico, Pico”, comenzó a corear buena parte de las casi seis mil personas que llenaron la cancha central. El argentino no dudó: presionó con un juego agresivo y se llevó el pasaje a la segunda final de su carrera. “Entré un poco nervioso, pero el público me ayudó mucho. Me hizo crecer en actitud cuando estaba más cansado. Ahora se viene la final y tengo que estar concentrado. Hay que ir día a día, como decía el Cholo (Diego Simeone)”, adelantó el tandilense, fanático de Estudiantes.

Su próximo rival es, quizá, de menor jerarquía, en relación con los jugadores que dejó en el camino. Di Mauro, 98º en el ranking de la ATP, jugará su primera final de un torneo de ATP. “Si llegó a la final es porque viene de una buena semana. Es un jugador que no se entrega, que no erra. Hay que estar muy atento y tengo que tratar de aprovechar las oportunidades. Pero lo importante será tomar la iniciativa y ser agresivo”, precisó el argentino quien, de ganar, se meterá dentro de los 50 mejores tenistas del mundo.

Será la segunda oportunidad en la que el argentino jugará la final de un torneo ATP. La última vez que llegó a la definición de un certamen fue en Casablanca 2005, donde cayó ante Mariano Puerta en dos sets. “Puede haber un antes y un después luego de este partido. Se me podría haber dado las semanas previas, pero por suerte pasó en Buenos Aires, en mi casa, con mi gente”, señaló el tandilense. Mónaco dio un nuevo paso hacia su primer título. “Todavía no gané nada –sostuvo–. Falta una batalla más.”

Informe: Hernán Matz