Desde anoche, el mendocino Juan Carlos Reveco es el nuevo campeón minimosca de la Asociación Mundial de Boxeo. Derrotó por nocaut técnico a los 2 minutos y 38 segundos del 8º round al tailandés Nethra Sasiprapa en pelea realizada en el Polideportivo Vicente Polimeni de Las Heras, en la provincia de Mendoza, y se transformó en el 29º boxeador que gana un título del mundo en la historia del pugilismo profesional de la Argentina y el cuarto nacido en Mendoza, luego de Nicolino Locche, Hugo Corro y Pablo Chacón.

Reveco (48,800 kg) definió la pelea cuando más complicada se le había puesto. Un corte debajo de la ceja izquierda que le apareció en el 6º asalto comprometía sus chances. Pero como si la sangre que le recorría el rostro lo hubiera impulsado rumbo a la hazaña, a partir de la 7ª vuelta salió a llevárselo por delante a Sasiprapa (48,600 kg) recurriendo a su izquierda en jab y en directo a la cara del tailandés, que había dominado los rounds 4º, 5º y 6º, en el que sufrió el descuento de un punto por aplicación reiterada de golpes bajos.

En verdad, nada de lo que hasta allí había sucedido hacía presagiar la definición que sobrevino cuando Reveco hizo vacilar a Sasiprapa con una combinación a la cabeza. El mendocino apuró y, con otra descarga, envió a la lona por primera vez al tailandés, que dio la impresión de haber caído más por decisión propia que por el efecto de los golpes de Reveco. Sin embargo, no bien se puso de pie, Reveco se le abalanzó y, con tres impactos, una izquierda al hígado y una derecha y otra zurda a la cabeza, volvió a derribarlo en forma tan concluyente que el árbitro panameño Gustavo Padilla no se molestó en iniciar la cuenta y directamente decretó la victoria de Reveco, la 16ª de su carrera, la sexta antes del límite.

El mendocino, pupilo de Pablo Chacón y Ricardo Bracamonte, es un boxeador de buena línea técnica que ganó aplicando su mejor arma: su izquierda en jab, directo y cross. Llegó joven al título, a los 23 años, y ahora deberá ratificar sus virtudes ante los mexicanos, filipinos, japoneses, coreanos y tailandeses que históricamente han mandado en los pesos chicos.