Martín Palermo tuvo un día agitado, probablemente más que el propio domingo. A partir de su publicitado gol 180 con la camiseta de Boca, el delantero pasó más o menos por 180 programas televisivos y radiales, donde explicó unas 194 veces sus sentimientos por la cifra lograda (en eso superó la marca de Varallo) y por todo lo que se le cruzó por la cabeza en el momento de ejecutar el penal. Incluso, reconoció que le temblaron las piernas y que le hubiera gustado que el tanto llegara de otra forma.

“Hubiese querido hacerlo de cualquier otra manera y no de penal. Es mayor el nerviosismo y se me pasaron muchas cosas por la cabeza por todo lo que generaba ese gol. Antes de patear me temblaban las piernas”, reconoció Palermo, que admitió que pensó mucho en todo lo que se hubiese hablado si no convertía ese tanto. Además, también aclaró que se trató de un desahogo muy importante. “Me quité un peso de encima. Se habló mucho en la semana, así que me sentí muy nervioso. Me cansé mucho, pero por los nervios”, señaló el goleador, que en Boca convirtió 150 tantos en los torneos locales y 30 en certámenes internacionles. Lo cierto es que Palermo nunca quiso entrar en polémicas sobre si llegó o no al record de Varallo. “Cuando llegue a los 194, me van a decir que faltan”, bromeó.

Sobre el futuro y nuevas metas, el goleador reconoció que no se las plantea, sino que simplemente las va concretando. “Lo único que quiero es seguir en este nivel y el 30 de junio firmar un nuevo contrato con Boca. No pienso en los goles que me faltan para... Los trato de convertir y vivir el día a día”, sostuvo el ex delantero de Estudiantes. Lo curioso es que no se garantizó el futuro cerrando su campaña en el club, ni tampoco en Estudiantes. “El final de la película no lo conozco. Puede ser acá, en Estudiantes o en otro lado. El tiempo dirá.”

Una de las preguntas recurrentes fue todo lo que pensó en el momento del gol. Y casi como si se tratara de un discurso aprendido de memoria, Palermo fue respondiendo casi con las mismas palabras. “Pensé en todo lo que viví en Boca. En los buenos y los malos momentos. Y en lo lindo que fue lograrlo, en La Plata, justo en mi ciudad.”