Oscar Ahumada siempre se caracterizó por hablar sin pelos en la lengua, y tras la dura derrota sufrida ante Boca no hubo ninguna excepción. El volante de River sostuvo que la actuación del equipo en el superclásico “fue una vergüenza”, y además les pidió perdón y paciencia a los hinchas, quienes en Mendoza demostraron que están cansados del mal momento que atraviesa el equipo desde el año pasado.

Puede que Ahumada se haya transformado en un símbolo del desencanto de River. Pero el gesto de salir a dar la cara por el grupo, cuando ni el técnico Néstor Gorosito la dio, da muestras de que no les escapa a las situaciones complicadas. “Esto es una vergüenza, así lo sentimos y les pido perdón y paciencia a los hinchas”, manifestó el volante, que de paso aprovechó para mandarle un mensaje a la dirigencia, reclamándole la llegada de refuerzos. “Hay que dar vuelta la historia, pero nos hace falta alguien que maneje los hilos del equipo”, sentenció Ahumada, dejando claro que con el plantel que salió último en el Apertura la historia difícilmente pueda cambiar.