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Nicolás Almagro (foto), el principal favorito del torneo, dejó sentada su posición respecto de la iniciativa que pretende cambiar la superficie del próximo ATP de Buenos Aires. Lejos de esbozar una respuesta políticamente correcta, mostró toda su indignación. “Ya quedan pocos torneos sobre polvo de ladrillo y encima nos quieren quitar más. Si lo hacen, estarían perjudicando a los jugadores de tierra, entre los cuales me incluyo”, expresó el español a Página/12, luego de su cómoda victoria 6-1, 6-2 contra el argentino Pablo Galdón.

Aunque la tendencia esté cada vez menos arraigada, en Argentina el tenis siempre estuvo identificado con el polvo de ladrillo, algo que Almagro utilizó como argumento: “Esta gira lleva mucho siendo en tierra y no entiendo el porqué del cambio. Los organizadores y la ATP deberán estudiarlo bien, pero es algo que no comparto”. Las razones que el español dice desconocer tienen que ver con las invitaciones a los tenistas. Como los Masters 1000 de Indian Wells y Miami se disputan en marzo, el torneo de Buenos Aires no sirve de preparación, razón por la cual se dificulta la convocatoria a los jugadores que están mejor rankeados.

“Esta gira siempre fue sobre polvo de ladrillo y es donde mejores resultados he obtenido. Por lo tanto, me gustaría que siguiera siendo así”, continuó. Sin embargo, a pesar de haber ganado los ocho títulos de su carrera sobre polvo y de su reciente consagración en Costa do Sauípe, Almagro consideró que su rendimiento en cancha rápida también ha sido bueno. “En Auckland llegué a semifinales y en Australia llegué a octavos de final”, ejemplificó.

El verdadero motivo de su enojo tiene que ver con la cantidad de torneos que se disputan en cada superficie. “Hay muchas más semanas sobre canchas rápidas que de tierra”, se quejó. En ese aspecto, los números le dan la razón: de los 66 torneos ATP, 23 se juegan sobre polvo, 24 en cemento al aire libre, 13 sobre cemento indoor y 6 en césped.

Con el objetivo de defender a David Ferrer, Almagro desestimó que la baja de su compatriota por cansancio haya sumado a la iniciativa que pregonan los organizadores: “El problema no tiene que ver con que David no esté aquí, sino con que el calendario tiene muchas semanas de competición”. Una de las versiones indicaba que el cambio se realizaría para contar con la participación de Juan Martín Del Potro, quien eligió jugar el Abierto de Buenos Aires únicamente en 2006 y cayó en la primera ronda. Sin embargo, el director general Martín Jaite negó que eso fuera cierto.

En la misma sintonía que Almagro, el porteño Juan Pablo Brzezicki admitió que el cambio no le agradaría: “No estaría tan bueno, porque cada vez hay más torneos de canchas rápidas. Esta gira es muy importante para los jugadores que juegan en polvo de ladrillo”. Ambos tenistas consideraron que ellos sólo pueden opinar, ya que la decisión deben tomarla los organizadores. Por dicha razón, como los certámenes de la gira sudamericana deben tener la misma superficie, los dueños de los torneos debatirán el tema en marzo.

Informe: Andrés Pappagallo.