Los jugadores argentinos estuvieron más interesados en cuidar su físico que en las respuestas tácticas, y sólo Javier Mascherano mantuvo su entrega habitual, más allá del compromiso.

- Romero (5): no tuvo mucho trabajo, pero se lo nota bajo una gran presión cada vez que interviene. Se lo vio nervioso en algunos rechazos.

- F. Fernández (6): comenzó sobre el lateral derecho, pero sólo duró 13 minutos y volvió al centro. Estuvo correcto y no se complicó ante los delanteros.

- Mascherano (7): el mejor de Argentina. Por entrega, entusiasmo y actitud. Se acomodó mejor cuando pasó a la mitad de la cancha.

- Basanta (5): juega demasiado contenido y más preocupado por no cometer errores que por los ajustes defensivos.

- Rojo (5): recuperó bien la pelota y se desprendió mucho hacia adelante ante los eslovenos, que le permitieron hacerlo sin inconvenientes.

- A. Fernández (6): estuvo muy activo y parece haber dejado atrás la lesión. Se mostró como salida por la derecha y también como organizador de la ofensiva. Una alternativa interesante.

- Biglia: participó 13 minutos y salió por un golpe.

- Pérez (5): no aportó mucho y cuando tuvo la pelota se desprendió rápido de ella. En el segundo tiempo se sumó a la última línea para que fueran cinco en ese sector.

- Rodríguez (6): se mantuvo por la izquierda y fue importante en ataque mientras pudo, ya que el físico no lo ayuda. Estuvo cerca de convertir en dos oportunidades.

- Alvarez (6): ofreció algo del juego que dio en Vélez, con desequilibrio y gambeta en velocidad. Marcó el primer gol con un remate de zurda.

- Lavezzi (5): mucho vértigo y poca claridad. Cuando encaraba parecía que nadie lo podía parar y terminaba en el piso u ofuscado con el árbitro.

- Campagnaro (4): ingresó rápido y ocupó el puesto de lateral. No está claro en dónde puede ser más útil, ya que no termina de conformar en ninguna de las posiciones del fondo.

- Gago (5): es vital cuando aporta fútbol, ese que no mostró en Boca, y puede juntarse con los de adelante.

- Di María (6): sigue en un gran nivel. Desborda cuando se lo propone y combina con categoría en ataque.

- Agüero (5): no está del todo fino como en sus mejores días, pero en cualquier momento puede aparecer con todo su repertorio. Después de Messi es el más temido por los rivales.

- Messi (6): con un rato le alcanzó para no sólo hacer un gol, sino también para dejar algunas de sus fantasías. Sigue siendo determinante para el equipo.

- Mammana: el chico que viajará como sparring cumplió el sueño de su vida de jugar junto a las estrellas.