Alan Schlenker, uno de los líderes de la barra brava de River, se entregó ayer a la Justicia, que lo acusa por el crimen de Martín Gonzalo Acro, pero su declaración indagatoria pasó a un cuarto intermedio hasta hoy a la 10, según informó su abogado, Roberto Ribas. Schlenker estuvo declarando durante algo más de tres horas ante el juez Luis Rodríguez, quien lo interrogó acerca de su vinculación con el asesinato de Acro. Junto a su hermano William y otros integrantes de la barra brava, Schlenker quedó procesado por “homicido agravado”.

“Estuvimos declarando desde las cinco de la tarde y el juez, con buen tino, decidió realizar un paréntesis, cuando finalizaremos con la diligencia”, indicó el letrado, que confirmó que a su defendido se le imputa ser uno de los autores intelectuales del asesinato del barrabrava, que estaba vinculado a la facción liderada por Adrián Rousseau.

Schlenker quedó detenido en la Alcaídia de Tribunales y luego será traslado al Complejo Penitenciario de Marcos Paz, donde ya se encuentran alojados varios de los detenidos por el crimen. “No aguantaba más”, explicó brevemente el mayor de los Schlenker al salir al mediodía del despacho del juez, al ser trasladado a Tribunales. Según su abogado, Schlenker no quiso seguir prófugo, por lo que decidió entregarse, pese a que su consejo era que recién se entregara en unos días.