Los fabricantes de sweaters elevaron un listado de precios a la Secretaría de Comercio Interior de 144 productos definidos como “básicos”, con incrementos de hasta 10 por ciento respecto del invierno pasado. Este tope anunciado por la dependencia liderada por Guillermo Moreno se mantendrá desde marzo hasta que finalice el invierno. Empresarios del sector informaron a este diario que la suba interanual es de 15 por ciento si se incluyen los productos de moda.

Hace dos semanas Moreno pidió a los representantes del sector la lista de precios de los productos básicos que comercializan. Y el viernes pasado cumplieron con ese reclamo los presidentes de la Cámara Argentina de la Industria del Sweater, Pedro Bergaglio; de la Cámara Textil de Mar del Plata, Guillermo Fasano, y el propietario de la fábrica de pulóveres Mauro Sergio, Mauro Sergio Todisco. El listado indica que aumentaron desde el invierno pasado no más que 10 por ciento. El compromiso del sector es que se mantendrán los actuales valores hasta finalizar el invierno de 2008. “El aumento se debe básicamente a la suba de los costos de la mano de obra de 19 por ciento. Este ítem pesa casi la mitad del costo total. También tuvimos subas en la energía, los hilados especiales y el petróleo para los sintéticos. De todas manera, en estos últimos casos los aumentos fueron menores”, aseguró a Página/12 Guillermo Fasano.

Para la confección del listado presentado a Moreno, la cámara del sector realizó un relevamiento, incluyendo las compañías más importantes: Mauro Sergio, Casino y Genoa. Estas tres empresas concentran el 65 por ciento del total facturado en Mar del Plata, uno de los dos polos productivos más grandes junto con la ciudad de Buenos Aires. Fuentes del sector aseguraron a este diario que en Capital Federal el aumento habría sido menor dada la mayor competencia que existe en la ciudad.

Los pulóveres incorporados en el acuerdo no incluyen la totalidad de la oferta de esas prendas. El tope de aumentos de 10 por ciento corresponde sólo a los “productos básicos”, es decir, no son de marcas reconocidas. No se incluyen, por ejemplo, los modelos de moda. Con éstos, el aumento pasaría a 15 por ciento interanual.

En la reunión con Moreno, los representantes textiles también plantearon su preocupación por el creciente costo de los juicios laborales. “Las demandas laborales infladas son un problema. Sucede que en estos litigios se piden sumas excesivamente altas y aunque la empresa termine ganando, se incurre en altos costos”, aseguró Fasano a este diario. Moreno pidió a los textiles que le presentaran formalmente un documento al respecto y se comprometió a analizar la situación.