El gobierno nacional dispuso una prórroga por 15 días de la intervención de la empresa Trenes de Buenos Aires (TBA), a la espera de la finalización de las pericias judiciales para determinar las causas del accidente de Once del 22 de febrero, en el que murieron 51 personas y más de 700 resultaron heridas. El Juzgado Nacional Criminal y Correccional Federal Nº 11, a cargo de Claudio Bonadío, responsable de la investigación, consideró ayer que la recolección de datos sobre la formación siniestrada está concluida, por lo cual dispuso que sea removida del andén de Once en el que se encuentra desde que se produjo la tragedia.

El fin de la recolección de datos abrirá paso ahora al dictamen técnico que establezca si el choque se debió a un defecto del sistema de frenos o a un error humano, y si la cantidad de víctimas se vincula al deterioro del material rodante.

La resolución del Ministerio de Planificación Federal, que dispuso la prolongación de la intervención a TBA, señala que Raúl Jorge Baridó, funcionario de la Sindicatura General de la Nación, seguirá a cargo de “la intervención administrativa técnico-operativa temporal al contrato de concesión para la explotación de los servicios ferroviarios de pasajeros correspondientes a las lineas General Mitre y Sarmiento”.