El Gobierno realizó ayer el cuarto sorteo del programa de préstamos para la construcción de viviendas. En la Lotería Nacional, 24.000 familias que poseen terreno propio fueron seleccionadas para iniciar los trámites en el Banco Hipotecario. En total el número de interesados que ya pueden comenzar el proceso formal para acceder al préstamo asciende hasta 59.200. El próximo 27 de noviembre se realizará el segundo sorteo para aquellos postulantes que no tienen terreno. El director ejecutivo de la Anses, Diego Bossio, destacó ayer el impacto virtuoso en materia de inversión y empleo que generará la construcción de viviendas financiadas por el Pro.Cre.Ar. Asimismo, consideró que la iniciativa busca comenzar a subsanar “desde el Estado” el déficit habitacional y el déficit de crédito hipotecario existente en el país. “Con el Pro.Cre.Ar volvió el crédito hipotecario”, afirmó ayer el viceministro de Economía, Axel Kicillof.

“Este programa es aceleradísimo, eficiente, transparente e incuestionable”, sostuvo Kicillof. “Vamos a tener una altísima tasa de otorgamiento de créditos, es un éxito rotundo. La gente ya comenzó a construir su vivienda”, indicó el funcionario antes de comenzar el sorteo. El Pro.Cre.Ar se puso en marcha en junio y ya recibieron el primer desembolso del préstamo 750 familias que cuentan con terreno. Mientras tanto, 1500 préstamos están en el tramo final del proceso y otros 3000 en la etapa de aprobación.

Según estiman en la Anses, hacia fines de abril las 60.000 familias con terreno que están habilitadas para tramitar el crédito en el Banco Hipotecario deberían acceder al financiamiento. Entre el 85 y 90 por ciento de esos beneficiarios accederá efectivamente al crédito, ya que algunos de los postulantes presentan irregularidades en el dominio, poseen más de un terreno –se desestimó el caso de una señora beneficiada que era propietaria de 31 parcelas– o simplemente desisten.

Ayer se celebró el último sorteo del año para aquellas familias que tienen su propio terreno y también se realizó un “repechaje” donde quienes no resultaron favorecidos en las ediciones previas tuvieron una nueva posibilidad. En total, alrededor de 24 mil interesados de todo el país fueron habilitados para comenzar los trámites.

“No regalamos la plata a nadie. Estamos dando crédito a tasas razonables y la gente responde”, expresó Kicillof. El funcionario destacó el efecto “multiplicador” que tiene la industria de la construcción, no sólo sobre albañiles y arquitectos, sino en las empresas proveedoras de materiales como ladrillos, cemento y hormigón, así como las firmas de servicios y el comercio en general. Por su parte, Bossio remarcó el impacto del Pro.Cre.Ar en materia de empleo, recaudación tributaria y “aportes y contribuciones” al sistema de la seguridad social.

“Esto es un cambio cultural, vuelve el crédito hipotecario a la Argentina”, enfatizó Kicillof. En tanto, el director ejecutivo de la Anses dijo que el Procrear se extenderá por cuatro años y que con su concreción “se cambia la cultura del no crédito”. “Con este programa se hace realidad un sueño, en una Argentina con déficit habitacional. El kichnerismo vino a reparar ese tema. Lo estamos haciendo en tiempo y forma”, apuntó Bossio. Además, el funcionario sostuvo que, de los 20.000 créditos que se otorgaron en el país el año pasado, el 60 por ciento fueron concedidos por la banca pública: “Tuvo que venir el Estado a atender el déficit crediticio hipotecario”, enfatizó en referencia a la reticencia del sistema financiero para ofrecer financiamiento para el acceso a la vivienda.