La venta callejera a nivel nacional registró una caída de 2,9 por ciento entre enero y marzo, frente al mismo período de 2012 y de 5,3 por ciento en la comparación intertrimestral. Según un relevamiento que realiza mensualmente la Cámara Argentina de Comercio (CAC) para combatir lo que considera “puestos callejeros ilegales”, la suba más pronunciada en la cantidad de esos precarios puntos de venta se observó en Mendoza y Rosario. Asimismo se observó un alza en la venta de alimentos y bebidas, uno de los rubros más populares. La actividad es considerada por distintos organismos internacionales como la OIT como un foco de informalidad laboral en la región. El tamaño del sector en la Argentina es inferior al de otros países como Perú o Bolivia. En el informe de la CAC, entidad empresaria que preside Carlos de la Vega, se registraron reducciones en la venta ilegal en las ciudades de Buenos Aires, Salta, Neuquén y Posadas, parcialmente compensadas por subas en Rosario y Mendoza. El resto de las ciudades cubiertas por el relevamiento fueron Paraná y Santa Fe. La entidad informó que el rubro alimentos y bebidas fue el más comercializado en la venta ilegal callejera, seguido de indumentaria, joyería y óptica y juguetería.