Las oficinas de las empresas distribuidoras de energía eléctrica Edenor y Edesur fueron allanadas ayer en el marco de una causa penal por los cortes de luz entre diciembre y enero pasado. Las diligencias en busca de pruebas fueron ordenadas por el juez federal Luis Rodríguez, a pedido del fiscal Ramiro González, a fin de tener acceso a los libros de ambas compañías. En los documentos de directorios, asambleas, registro de acciones, inventarios, balances y compras se buscan datos sobre el uso dado por esas empresas a los subsidios recibidos por parte del gobierno nacional. La investigación pretende determinar si los prolongados cortes en el momento de la peor ola de calor de las últimas décadas fueron producto de un sabotaje, y cómo invirtieron las empresas los subsidios que recibieron del Estado. Desde Edenor afirmaron que colaboran con la Justicia en la causa.