[cerrar]

Comparta esta nota con un amigo

E-Mail de su amigo
Su nombre
Su E-Mail

El secretario de Energía, Daniel Cameron, admitió que existe una “crisis energética, pero no una emergencia” y confió en que las medidas que está adoptando el gobierno nacional en acuerdo con empresas productoras de gas permitirá “sobrellevar” la situación. Cameron confirmó, además, que habrá una recomposición del precio del gas sobre los consumos industriales y de las usinas térmicas, en un proceso que concluirá a mediados del 2005. Reveló que el proceso de incremento de las tarifas para el resto de los usuarios se extenderá hasta diciembre del 2006.
El funcionario informó que la actualización del precio del gas en boca de pozo lo ubicará en un dólar por millón de BTU (unidad de medida calórica del gas). Cameron formuló esas afirmaciones durante una extensa exposición, de más de cuatro horas, ante la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados. El plenario comenzó con un accidente porque el presidente de la Comisión de Energía, Jesús Blanco, previo al inicio, se cayó de una escalera y debió ser internado en el hospital Ramos Mejía, al recibir un golpe en su cabeza.
Con respecto al abastecimiento del gas en la próxima temporada invernal, Cameron ratificó que está garantizado el suministro a los consumos residenciales, comerciales e industriales con contratos de suministro ininterrumpible. En tanto, reveló que para aquellas industrias con contrato interrumpible “probablemente” haya problemas de abastecimiento durante 60 a 75 días, en lugar de los 20 a 25 en los que normalmente cada año se les corta transitoriamente el suministro, según mencionó. En los últimos dos años, sin embargo, los cortes abarcaron muchos más días que los señalados por Cameron, según un reciente informe del Enargas.
Con relación a la electricidad, Cameron señaló que el Gobierno está “trabajando en un acuerdo para importar energía desde Brasil a partir de mayo”. A tal fin, se harán dos licitaciones entre generadores públicos y privados del vecino país para el suministro de energía hidráulica y térmica por hasta 400 megavatios. Cameron detalló ante los legisladores que la Argentina tiene una capacidad instalada de 23.500 MWh y ahora se están utilizando 20.000 MWh. Si bien aseguró que no habrá cortes en el suministro de gas y energía eléctrica, advirtió que se debe hacer un programa de mejoras para superar los problemas que hoy existen por la falta de inversiones en los últimos años.
En cuanto a la eventual suspensión de exportaciones de gas a Chile, el funcionario informó que se está realizando “un seguimiento del accionar de cada productor respecto del suministro del mercado interno y externo”. El funcionario confirmó que “se priorizará el requerimiento interno de gas”.
Cameron remarcó que, a criterio del Gobierno, “son las empresas privadas exportadoras las que tendrán que asumir las consecuencias de eventuales incumplimientos contractuales” por la provisión del gas, aunque admitió diferencias de criterio entre los gobiernos de ambos países. “Chile dice que esto está al nivel país-país y nosotros creemos que está a nivel de los privados.”
Al término de la reunión, el radical Víctor Fayad acusó al Gobierno de “mucha imprevisión” para afrontar esta “crisis que hoy fue reconocida por Cameron (...). Aquí no hay un problema de precios sino de una falta de inversión que se ha producido en los últimos años”. A su vez, el demoprogresista Alberto Natale señaló que “no se puede poner como excusa el crecimiento, ya que la economía estuvo en recesión desde 1999 hasta el 2002 y recién el año pasado creció un 8 por ciento (...). En realidad, esto es consecuencia de la devaluación”.