ECONOMíA › REDRADO SE REUNE CON LA UIA PARA ANALIZAR VIAS DE FINANCIAMIENTO
Usar reservas para hacer obras
El presidente del Banco Central almorzará con la cúpula de la UIA. Evaluarán la medida en estudio de aplicar reservas para obras públicas. También discutirán sobre el nivel de la tasa.
Por Claudio Zlotnik y David Cufré
Martín Redrado se reunirá este mediodía con la cúpula de la Unión Industrial Argentina (UIA). Con los empresarios, analizará una medida de alto impacto económico, pero también político: la posibilidad de utilizar reservas del Banco Central para inversiones en obras públicas. La iniciativa partió del despacho de Néstor Kirchner y ahora hay un grupo de funcionarios que estudia los mecanismos para llevarla adelante.
El financiamiento de obras con reservas tendría como objetivo central continuar con el elevado ritmo de crecimiento económico. Roberto Lavagna y el propio jefe de Estado vienen insistiendo en la necesidad de elevar el monto de las inversiones. La directa participación del Estado en la cuestión sería determinante para cumplir con la meta.
El almuerzo con los industriales se realizará a pedido del banquero central en la sede de la UIA. Los empresarios escucharán de primera mano las ideas que tienen los funcionarios para llevar a cabo el ambicioso plan.
La utilización de las reservas para fomentar la inversión productiva parece, en una primera lectura, una iniciativa audaz. El Banco Central viene acumulando divisas desde que, superada la explosión de la convertibilidad, la economía dio muestras de recuperación. En lo que va del año, el BCRA sumó nada menos que 5962 millones de dólares. El stock se encuentra en 25.438 millones de dólares, y superaría holgadamente ese monto si no fuera porque la Argentina paga puntualmente los vencimientos a los organismos financieros internacionales. Por caso, en las dos últimas jornadas, las reservas registraron una caída de 256 millones por los giros que se realizaron a esas instituciones.
Para que esta medida prospere sería necesario modificar la Carta Orgánica del Central. Esa norma, que establece las funciones y los límites de acción de la autoridad monetaria, les pone un tope a los préstamos que el Banco puede concederle al Tesoro nacional. La idea sería ampliar ese techo.
En los primeros borradores que se bosquejaron en los despachos oficiales, los fondos que el BCRA destine a la inversión productiva formarán parte de un fideicomiso específico. Ese sería el instrumento elegido para evitar desvíos del dinero hacia otros destinos.
Redrado aprovechará la reunión con los industriales para escuchar opiniones sobre la marcha de la economía. El jefe del Central ya mantuvo este tipo de encuentros con banqueros y economistas de la city.
La UIA irá con un pedido puntual: que los bancos incrementen su nivel de préstamos a las empresas. Consideran que en un contexto de alta liquidez en el sistema financiero, las entidades tienen un buen incentivo para ofrecer créditos más baratos.
Ese reclamo a los financistas, un clásico de parte del sector productivo, tendrá un condimento especial esta vez: el nivel de las tasas de interés fue el eje de una fuerte discusión que Roberto Lavagna y Redrado mantuvieron en los últimos días. El ministro se mostró muy molesto porque el Central convalidó una suba en el costo del dinero en la colocación de Letras (Lebac) de largo plazo. Esa actitud, en la visión del ministro, distrae fondos que deberían destinarse al sector productivo en lugar de alimentar los balances de los bancos.
La cuestión de fondo en la pelea Lavagna-Redrado es que la mayor parte de los créditos bancarios a las empresas es de cortísimo plazo: adelantos en cuentas corrientes y descuentos de cheques, por ejemplo. Y que una suba de las tasas perjudica la perspectiva de incrementar los plazos. La ofensiva del Central es para mantener una política monetaria ordenada. Y así darles una señal a los financistas de que la autoridad monetaria no permitirá que un aumento en la emisión de pesos se traduzca en expectativas inflacionarias.