El gobernador bonaerense, Felipe Solá, intervino ayer en una polémica sorprendente entre las gestiones de rentas de la provincia y la AFIP, al defender la tarea del subsecretario de Ingresos Públicos provincial, Santiago Montoya. Sostuvo que no pagar impuestos “ahora no es más costo cero” para los evasores y salió al cruce de las críticas –indirectas– que hizo el titular de la AFIP, Alberto Abad. “Se equivoca Abad. No estamos en una época prehistórica”, sostuvo Solá, saliendo al cruce de los cuestionamientos que el funcionario nacional hizo por los mediáticos operativos organizados por Montoya. También aseguró que la recaudación de la provincia de Buenos Aires “aumentó” un 150 por ciento desde el 2001 y le otorgó el mérito a Montoya. “El crecimiento de la recaudación debido exclusivamente a la mayor eficiencia administrativa en impuestos medibles, en relación con la Nación, es del 150 por ciento” y “eso no es poco”, afirmó el gobernador. Solá afirmó que la prioridad de la provincia está centrada en captar recursos de “los que tienen Internet, camionetas 4x4 y varias casas, pero no pagan”. El mandatario afirmó que “si se compara un impuesto móvil de la Nación, como es el IVA, con uno móvil de la provincia, se puede ver que nosotros hemos recaudado más”.