La CGT rechazó ayer la negativa de la Unión Industrial a discutir salarios en medio de la crisis internacional, pidió respetar las fechas de las paritarias e incluso acusó a sectores empresarios de “extorsionar” con las amenazas de despidos y suspensiones. Tras una reunión en la sede de la CGT, su secretario gremial, Omar Viviani, cargó contra la UIA: “Los empresarios están acostumbrados a extorsionar. Intercambiar figuritas, salarios o despidos es chantajear a los trabajadores”. A la vez, el secretario adjunto de la CGT, Juan Belén, advirtió que las paritarias “tienen fecha de vencimiento y hay que respetarla”. La reacción sindical fue una respuesta al dirigente de la Unión Industrial Daniel Funes de Rioja, quien insistió en que “discutir hoy” aumentos salariales “es un disparate”. “Nosotros decimos que tenemos convenios: algunos cierran en febrero, otros en marzo, otros en abril y otros en mayo”, y “eso es porque tenemos que modificar los salarios, no es ningún disparate”, retrucó Belén. La pulseada salarial se dará este año en el marco de la crisis internacional, lo que pretende ser utilizado por sectores empresarios para moderar las subas. “Cambiaron las condiciones”, afirmó Funes de Rioja.