La carrera electoral en Colombia acelera su marcha. El uribista Juan Manuel Santos es oficialmente candidato. El movimiento derechista más importante del país, el Partido de la U, lo eligió ayer como su opción para reemplazar a Uribe. En la noche, Santos –ex ministro de Defensa– ya estaba dando su primer discurso como candidato del uribismo. Los aspirantes a legisladores, mientras tanto, debían guardar silencio porque el domingo cerró la campaña legislativa en medio de amenazas. El próximo domingo serán las elecciones para elegir parlamentarios y el 30 de mayo las de presidente. El mapa de riesgos electorales es preocupante para ambas jornadas.

Aunque Alvaro Uribe no puede decir públicamente el nombre de quien desea que lo reemplace en la presidencia, la decisión de la U fue reveladora. Este partido fue fundado por Santos y otros que abandonaron el liberal para llevar a Uribe al poder. “Juan Manuel Santos es el preferido de los colombianos para continuar con el proyecto de gobierno del presidente Alvaro Uribe”, dicen los movimientos que lo apoyan. Que va a “acabar con la culebra de las FARC” fue la primera promesa de campaña de Santos. Por su parte, Uribe no desaprovecha entrevista para indicar a los colombianos por qué opción política votar. Este fin de semana, Uribe les pidió a los colombianos no votar por opciones débiles. La suya, cuando era candidato, era la campaña de la mano fuerte. “Porque las opciones de debilidad, disfrazadas de que son los buenos, lo que hacen es fortalecer el terrorismo y abrir el espacio para que lleguen gobiernos que anulen las libertades”, señaló el presidente. Este violaría la ley si hace público el nombre de su candidato favorito.

Juan Manuel Santos es hasta ahora el candidato del uribismo, pues todavía no se sabe quién será el que inscriba el Partido Conservador, otro movimiento que impulsó la elección y la reelección de Uribe. Como una tercera “re” no fue avalada por la Corte, se esperaba que los uribistas acordaran un candidato. Santos propuso ser el único, pero Arias se negó y, de ganar el próximo domingo en la consulta conservadora, sería el segundo candidato de Uribe.

Los otros presidenciables son Rafael Pardo, liberal; Sergio Fajardo, independiente; Alvaro Leyva, José Galat y el opositor Gustavo Petro. Esta semana se define si Petro podría aspirar a la presidencia, pues un político uribista lo tiene demandado, aduciendo que fue condenado por rebelión y por ello no puede ocupar cargos públicos. Hasta ahora el DAS y la procuraduría no encontraron registros al respecto y el consejo nacional electoral dio concepto favorable al aspirante del Polo Democrático Alternativo.

La policía informó que las guerrillas de las FARC y el ELN tienen intenciones de alterar el orden público a propósito de las elecciones. Esta semana ya fue frustrado un atentado contra un candidato parlamentario secuestrado y liberado por las FARC. Beltrán se salvó al cancelar el acto de cierre de su campaña. Desde el domingo, ninguno de los 2539 candidatos al Congreso puede hacer proselitismo político en plazas públicas o espacios en medios de comunicación, aunque la publicidad continúe circulando. Serán 102 los senadores elegidos por circunscripción nacional y 166 los representantes a la cámara votados a niveles regionales. El principal reto de los nuevos parlamentarios, además de conseguir las mayorías para ganar, es acabar con el manto de corrupción y vinculación con grupos armados y del narcotráfico con que carga el actual Congreso colombiano.

Para los electores, el mayor riesgo es la presencia de actores armados a lo largo y ancho del país. La Defensoría del Pueblo entregó un mapa de riesgos electorales señalando que las elecciones del próximo 14 de marzo están “altamente amenazadas” en 244 de los cerca de mil municipios que hay en el país.