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En medio de tanto ruido político, la titular del Banco Central, Mercedes Marcó del Pont, pretende al menos ser escuchada. Cuando faltan escasos días para que se trate en el Senado el pliego con su designación al frente de la autoridad monetaria, la funcionaria envió ayer una carta a la Comisión de Acuerdos de la Cámara alta para solicitar una audiencia en la que pueda exponer sus antecedentes. Finalmente eso ocurrirá mañana. Así fue consensuado por el jefe del bloque del Frente para la Victoria (FpV), Miguel Angel Pichetto, y su par de la UCR, Gerardo Morales. “Vamos a escuchar, pero no vamos a variar nuestra posición”, dijo Morales a modo de adelanto de la intransigencia que reina hoy la discusión parlamentaria. De todos modos, para el Ejecutivo la exposición de mañana es en sí misma un logro, porque permitirá instaurar en la sociedad el tema del uso de las reservas.

Los cruces entre el oficialismo y la oposición por los espacios de poder dentro del Congreso dejaron relegadas a un segundo plano varias discusiones de fondo, lo que se reflejó en la falta de fundamentación sobre la que sustentan la posible revocación de Marcó del Pont en su cargo. Referentes de la oposición con mayoría en el Senado pretendían incluso derogar esta semana el pliego sin haber permitido que la funcionaria hiciera su descargo. Es por eso que la titular del Central solicitó la audiencia para exponer sus antecedentes.

La carta que envió Marcó del Pont es la siguiente: “Frente al inminente tratamiento del pliego remitido por el Poder Ejecutivo al Honorable Senado de la Nación para mi designación como presidenta del Banco Central de la República Argentina y toda vez que no se concretó la posibilidad de ser escuchada por la Comisión de Acuerdos de ese cuerpo es que vengo a solicitar que, en el ámbito que el Senado estime procedente, se me conceda la oportunidad de exponer acerca de mis antecedentes y mi gestión en el Banco Central desde que fuera nombrada en comisión. En el entendimiento de que con mi testimonio sólo pretendo contribuir a fortalecer la calidad institucional que las decisiones de ese cuerpo deben observar, confío en que mi solicitud será justamente atendida”.

La misiva arribó al Congreso en momentos en que sectores del oficialismo y la oposición exploraban la posibilidad de encarar una negociación que ayude a destrabar el conflicto. Finalmente esta semana se resolverá la integración de la Comisión Bicameral de Seguimiento de Trámites Legislativos. En este caso, quedaría conformada por ocho miembros del oficialismo e igual cantidad de la oposición, mientras que la presidencia sería asumida por un representante de este último sector (ver página 5). Esto se negoció ayer entre los presidentes de los bloques del Frente para la Victoria y Unión Cívica Radical.

La visita de Marcó del Pont para hacer su descargo ante el Senado fue un reclamo de mínima del oficialismo. La estrategia, según explicaron a este diario fuentes del FpV, es plantear el debate público por el uso de las reservas para el pago de deuda, a partir de la presentación que haga la funcionaria en el Parlamento. Además, dado lo difícil que resulta revertir la negativa de la oposición por aprobar la designación, el Gobierno podría quitar su pliego y quedar en comisión hasta septiembre. No faltan también los que se esperanzan ante la posibilidad de un acuerdo entre las partes que evite el rechazo del pliego, algo que desde la oposición descartaron de plano.

La presidenta del Central había señalado que esperaba que los legisladores la evalúen por sus antecedentes y su trayectoria y que no que se tome la decisión sólo como una manera de establecer oposición. “Cuando impugnan mi pliego, no sé si es a mi persona. Quizás estén enojados porque estoy defendiendo desde las tripas esta decisión política”, afirmó la semana pasada en una entrevista televisiva. En este sentido manifestó sentirse “absolutamente tranquila” por haber actuado con la “máxima legalidad”.

Marcó del Pont se presentará entonces mañana al mediodía ante la Comisión de Acuerdos, que preside Marcelo Guinle (FpV), pero que la oposición controla con nueve miembros sobre quince. Los bloques opositores se reunirán hoy a las 15 y a las 18 concurrirán a la Comisión de Labor Parlamentaria, que también integra el oficialismo, para definir el temario del acuerdo, que incluye recibir a la titular del Central. “Desde la oposición todos tenemos la misma predisposición para escucharla, pero debe venir con predisposición de escucharnos. De todos modos, no vamos a variar nuestra posición, porque para nosotros es muy grave lo que hizo. Debe dejar de ser presidenta del Central”, adelantó Morales. Fuentes legislativas del oficialismo manifestaron a este diario que el hecho de que la oposición aceptase la petición de Marcó del Pont responde a que saben que se equivocaron con su “actitud destituyente” de la semana pasada.

La titular del Central fue citada el miércoles pasado para comparecer en el Senado. La invitación le fue comunicada un par de horas antes del convite y Marcó del Pont solicitó una nueva cita porque argumentó no había sido avisada a tiempo. La oposición le negó esta posibilidad. Morales adujo con tono sarcástico: “Qué otra cosa tenía más importante que venir a comparecer a esta comisión”. Finalmente, la comisión firmó el dictamen en el que rechazó el pliego. Por lo pronto, parece que cada una de las partes se lleva algo y, en el medio, se encuentra Marcó del Pont con un futuro incierto. No obstante, la funcionaria, a quien hasta la oposición más acérrima le reconoce una trayectoria impecable, sólo pretende, en medio de tanto ruido, hacerse escuchar.