Después de un maratónico debate de 29 horas, el Senado chileno despachó ayer el Presupuesto Nacional 2012. No hubo manera de que los congresistas se pusieran de acuerdo en la partida de Educación, pese a los seis meses de movilizaciones estudiantiles.

Por catorce votos a favor y ninguno en contra, el Senado aprobó la partida presupuestaria de Educación, que bordea los 420 millones de dólares, sin los votos de la oposición tras una maratónica sesión que comenzó el jueves por la mañana. La Concertación no votó la partida por estimar que el gobierno fue mezquino y durante todo el proceso nunca se abrió a ofrecer una fórmula de acuerdo que se acercara a lo que durante estos últimos seis meses han estado pidiendo los estudiantes en las calles de Chile.

En ese escenario, el oficialismo le dio al gobierno la posibilidad de aprobar el presupuesto para Educación sólo con sus votos.

Sin embargo, fue rechazado el Fondo Especial de Educación con cargo al Tesoro Público propuesto por el gobierno, lo que obliga a que sea analizado en la comisión especial mixta de diputados y senadores. El rechazo fue por 15 votos en contra y 13 a favor.

El jefe de los senadores de la Democracia Cristiana y líder del equipo negociador del bloque, Andrés Zaldívar, se lamentó por la aprobación presupuestaria. “La administración de Sebastián Piñera perdió la oportunidad de haber acompañado un buen acuerdo a favor de los estudiantes, dando una muestra de abrir espacios con una reforma educacional de fondo”, dijo. Por su parte, el ministro de Educación, Felipe Bulnes, destacó que los recursos para el sistema educativo aumentaron más de un diez por ciento en relación con el año anterior. “Hemos estado empeñados en sacar un acuerdo adelante. Creo que hubiese sido una buena noticia para el país haber gestado un acuerdo, pero la oposición no estuvo disponible para ello”, declaró con sorna Bulnes. En la misma línea, el líder de la UDI, Juan Antonio Coloma, valoró el presupuesto aprobado como el más importante de la historia de Chile. “Tiene un énfasis especial en el emprendimiento y en la educación. Lo aprobado va a la vena de mejorar el acceso y el financiamiento y la calidad de la educación”, dijo. Zaldívar informó que los desacuerdos se produjeron porque el Ejecutivo no se allanó a la gratuidad efectiva para el sesenta por ciento más vulnerable en la educación superior, ya que sólo ofreció becas según el arancel referencial y, además, no tomó en cuenta un fondo de revitalización de la educación pública. “Hicimos un intento de trabajo por tratar de buscar un acuerdo sobre la reforma educacional. Los recursos que puso el gobierno fueron insuficientes, puesto que fueron 460 millones de dólares adicionales a la Ley de Presupuesto original, pero creemos que el esfuerzo que había que hacer como país debía bordear los mil millones de dólares”, afirmó.

La senadora demócrata cristiana Soledad Alvear reiteró lo que su sector viene planteando desde hace semanas. “En esta ley de presupuesto no veo cuál es el horizonte, y por eso me parece que es insuficiente, no sólo por el monto de los recursos, sino que por la necesidad de una reflexión mucho más profunda con los distintos actores de la sociedad, y es evidente que tenemos que priorizar el diálogo para avanzar, no sólo en calidad sino también en equidad en la educación.” Otros recursos, como los destinados al Transantiago (transporte público) y al ingreso ético familiar, que provocaron grandes diferencias al interior del hemiciclo, fueron aprobados finalmente.