El presidente de Ecuador, Rafael Correa, fue ayer oficialmente proclamado candidato a la reelección por la oficialista Alianza PAIS (AP). En el gobierno desde el 2007, buscará en febrero quedarse al mando del Ejecutivo por otros cuatro años.

Con miles de partidarios y realizado en un estadio de fútbol en el sur de Quito, en el encuentro de la Alianza PAIS se decidió, además, que el actual ministro de Sectores Estratégicos, Jorge Glas, escolte a Correa en la fórmula para el 17 de febrero, cuando los ecuatorianos elijan presidente y legisladores. Correa señaló que ganar la presidencia no es el único objetivo del partido, sino que debe también apuntarse a ganar la mayoría de la Asamblea Nacional y pidió humildad y disciplina a quienes busquen una banca. “Se avanzó mucho, pero queda mucho por hacer, y sólo con el poder político en función de las grandes mayorías es posible cambiar esa realidad y convertir al Estado burgués al servicio de unos cuantos, en un Estado popular al servicio de los más pobres. Por eso aceptamos continuar”, remarcó el mandatario. El jefe del Palacio Carondelet anunció una fuerte tarea contra la corrupción. El presidente, quien con frecuencia ha denunciado planes de desestabilización, llamó al oficialismo a estar atentos. “Los poderes fácticos no están eliminados sino debilitados y, tal vez, en su debilidad son más furiosos, peligrosos, con ausencia de escrúpulos, límites y fronteras”, advirtió. Adelantó también una tarea de mayores esfuerzos por defender la soberanía y programó una labor de gobierno en base al eje conocimiento-revolución urbana y cultural. “Estamos haciendo historia y llevaremos a la victoria nuevamente a la revolución ciudadana en las elecciones de 2013”, señaló Correa.

La Convención sirvió también, de alguna manera, para que se despidiera el vice Lenín Moreno, a quien ni los cantos de “Lenín no se va” y “Lenín amigo, el pueblo está contigo” lograron convencer para que revirtiera su decisión de no volver a postularse. Las deliberaciones reunieron a unos 17 mil dirigentes y militantes, en el estadio de la Sociedad Deportiva Aucas. En la tribuna más alta se ubicó un cartel con la leyenda: “Rafael Correa, el candidato de la Patria”.

La decisión terminó de delinear el panorama electoral del país para febrero. Ya habían sido anunciados antes como candidatos el ex presidente Abdalá Bucaram (1996-1997) –exiliado en Panamá– en nombre del Partido Roldosista Ecuatoriano (PRE), el ex mandatario Lucio Gutiérrez por la Sociedad Patriótica, Alberto Acosta por la Coordinadora Plurinacional de Izquierdas y el magnate Alvaro Noboa, por el Partido Renovador Institucional Acción Nacional (Prian). La lista se completa con el banquero Guillermo Lasso, por CREO, el ex concejal quiteño Norman Wray por Ruptura 25 y Mauricio Rodas del Movimiento SUMA. Hasta que Correa asumió la presidencia en 2007, Ecuador enfrentó una crisis política de una década, la mayor de su historia, en la que tuvo siete gobernantes. De 49 años y reelecto en 2009 en comicios anticipados, Correa encabeza la intención de voto, con el 56 por ciento, seguido del banquero de derecha Guillermo Lasso, con el 23 por ciento, según la reciente encuesta de la empresa privada Cedatos.

La campaña proselitista se iniciará el 4 de enero y el 17 de febrero se efectuará la primera ronda de los comicios, que podría tener una segunda vuelta presidencial el 7 de abril, si ninguno de los candidatos alcanza la mayoría simple de votos. Además de presidente y vice unos 11,6 millones de potenciales votantes elegirán a 137 asambleístas y cinco parlamentarios andinos.