EL MUNDO
Un “eje del mal” hecho de libros, médicos y planes de alfabetización
Para Washington, Cuba, Venezuela y Brasil podrían integrar una especie de “eje del mal” latinoamericano. El eje existe, pero no es del mal sino una red creciente de intercambios educativos, económicos y técnicos que potencian las capacidades de sus integrantes.
Por Mauricio Vicent *
Desde La Habana
Las relaciones económicas y políticas entre Cuba, Venezuela y Brasil se estrechan cada día más. Sólo 10 días después de la discreta visita a La Habana del presidente venezolano, Hugo Chávez, para reunirse con su aliado y amigo Fidel Castro, el embajador del país sudamericano en la isla, Julio Montes, anunció que Cuba ayudará a Venezuela a recuperar su industria azucarera cediéndole fábricas, tecnología y asesoría técnica, en una operación que contará con el apoyo financiero de Brasil.
Montes informó en un encuentro con periodistas que, como parte del Convenio Integral de Cooperación entre Caracas y La Habana, firmado por los mandatarios de ambos países en el año 2000, dos ingenios azucareros venezolanos se han puesto en marcha con ayuda de técnicos cubanos y dos o tres fábricas de azúcar desmanteladas en la isla serán instaladas en Venezuela y contarán también con asesoría cubana. Las autoridades cubanas emprendieron el año pasado una drástica reestructuración del sector azucarero, que supuso el cierre de 70 de las 154 fábricas de azúcar que funcionaban en la isla, medida que afectó a 100.000 de los 400.000 trabajadores de esta industria.
El diplomático venezolano reveló que la instalación en su país de los ingenios azucareros cubanos en desuso será una operación triangular con Brasil, que aportará financiamiento. Los mandatarios de las tres naciones, Fidel Castro, Hugo Chávez y el brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, comparten desde hace tiempo amistad e ideología. Y sus vínculos son cada vez más estrechos. La semana pasada, el vicepresidente del Consejo de Estado de Cuba, Carlos Lage, y el ministro de Relaciones Exteriores, Felipe Pérez Roque –junto con Castro y los máximos responsables de las áreas económicas y políticas del gobierno cubano–, viajaron a Brasil para reunirse con Lula y con varios ministros de su gabinete. A su regreso a la isla, Lage declaró que en esos encuentros se repasaron “cada uno de los temas de colaboración bilateral que –dijo– recibirán un importante impulso en los próximos años”. El Convenio Integral de Cooperación entre Caracas y La Habana establece el suministro diario de 53.000 barriles de crudo venezolano a la isla con facilidades financieras, lo que supone aproximadamente la mitad de la factura petrolera cubana. A ello se suman los acuerdos de intercambio en materia de educación, cultura, salud y deportes. Hace dos años, Venezuela, cuyo volumen de intercambio comercial con La Habana ronda los 1000 millones de dólares, desplazó a España como primer suministrador de Cuba.
Aproximadamente 4000 enfermos venezolanos han sido atendidos en hospitales de Cuba en los últimos tres años, mientras que 268 médicos cubanos prestan servicios en zonas apartadas del país sudamericano, donde trabajan también cerca de 800 instructores en el entrenamiento de deportistas y participan en programas escolares y de salud. Además, en la isla cursan estudios, gratuitamente, más de 700 estudiantes venezolanos.
En la actualidad, un centenar de maestros cubanos participan en el plan nacional de alfabetización puesto en marcha por Hugo Chávez en su país. Este plan ha sido muy criticado por la oposición venezolana, que acusa al mandatario de “cubanizar” al país sudamericano. Para este programa de alfabetización, Cuba ha donado todo el material de estudio, incluidos dos millones de libros, videos y 50.000 televisores chinos ensamblados en la isla, dijo Montes.
El pasado fin de semana, Chávez realizó una visita sorpresiva a la isla para reunirse con Castro, a quien considera su mentor político. Según Montes, el mandatario venezolano, que en 2001 le celebró a Castro su cumpleaños en Venezuela, podría regresar a la isla el 26 de julio para el 50 aniversario del asalto al Cuartel Moncada, que supuso el inicio de la lucha armada de Castro contra el régimen de Fulgencio Batista, y festejar en la isla el 28 de julio, fecha en que cumple años.
* De El País de Madrid. Especial para Página/12.