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Pakistán hierve de atentados. Al menos 10 personas murieron ayer y 11 resultaron heridas en un ataque a una mezquita chiíta en Rawalpindi, cerca de Islamabad. El golpe, que fue definido por el presidente Pervez Musharraf como un acto “terrorista”, fue llevado a cabo por tres personas que dispararon a mansalva contra los feligreses. Ayer también, desconocidos abrieron fuego contra un avión militar norteamericano cuando hacía maniobras para aterrizar en un aeropuerto en Jacobabad. Ocho personas fueron detenidas. Asimismo, el gobierno de George Bush pidió la extradición del jeque Omar, que confesó ser el ideólogo del secuestro del periodista norteamericano Daniel Pearl.
Hacia el anochecer, cuando miles de fieles se encontraban en los templos para sus oraciones vespertinas, un nuevo ataque sorprendió a los paquistaníes. De acuerdo con la policía, tres hombres llegaron en motocicletas a la mezquita chiíta Shah-Najaf en el sector Pir Wadahi en Rawalpindi. Dos de ellos irrumpieron en la mezquita y comenzaron a disparar con armas automáticas a los más de 30 feligreses que se encontraban reunidos. “Fue un ataque a tiros repentino y muchos de nosotros rápidamente nos tiramos al piso”, dijo Anjum Abbass, quien resultó herido durante el ataque. Entre los heridos hay dos adolescentes. El presidente paquistaní, general Pervez Musharraf, se declaró “conmocionado” mientras que el secretario paquistaní de Interior, Tasneem Noorani, aseguró que se trató de un acto de “violencia sectaria”.
Este atentado es el más importante cometido en Pakistán, país musulmán de mayoría sunnita, desde que Musharraf inició una campaña de represión contra los grupos extremistas el 12 de enero. Más de 2000 personas fueron asesinadas en actos de violencia interreligiosos durante los últimos 10 años en este país.
Ayer un grupo de atacantes disparó contra un avión norteamericano cerca de la base aérea militar paquistaní de Shahbaz, en la localidad de Jacobabad, sin provocar víctimas. Los norteamericanos utilizan esa base en su “guerra contra el terrorismo” en Afganistán. Trascendió que hubo ocho detenciones.