El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró ayer que el asesinato del diputado chavista Robert Serra y de su esposa, María Herrera, el pasado 1º de octubre, fue perpetrado por paramilitares colombianos, a los que vinculó con el ex presidente de ese país Alvaro Uribe, y precisó que participaron ocho personas, dos de ellas provenientes de Colombia que aún no fueron detenidas, pero identificó a seis de los atacantes en un video que exhibió ante la prensa.

“Nuestro querido Robert tenía una protección invulnerable. Le consiguieron un punto vulnerable, que fue comprar al jefe de sus escoltas, quien es el que participa, convicto ya, lo ha contado todo, participa durante tres meses en la planificación a detalle, junto a toda la banda de asesinos, la banda paramilitar El Colombia, un maleante de apellido Padilla Leyve”, precisó Maduro. El mandatario recalcó en una declaración a la prensa en el Palacio Miraflores que el asesinato fue dirigido y planificado por un paramilitar colombiano que “sabemos quién es”, pero “falta la identificación legal” para revelar su nombre. Durante esa declaración, Maduro exhibió un fragmento de 2,13 minutos de un video que dijo tiene 11 minutos, donde puede verse cómo seis personas ingresan en la noche del miércoles 1º de octubre a la casa de Serra y algunos fragmentos del interior de la casa, de la que salen cinco minutos más tarde, presuntamente luego de cometer los homicidios.

El presidente destacó que el gobierno ya tiene identificado el móvil del asesinato, que forma parte de “una cadena de eventos que han diseñado para llevarnos al terreno de la violencia y la guerra civil fratricida”. Los presuntos autores de los homicidios fueron identificados como Edwin Torres y Carlos García, a quienes ayer la Justicia les dictaminó la privación de libertad.