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El primer ministro griego, Alexis Tsipras, se pronunció ayer a favor de un mejor trato a los refugiados que llegan a Europa en su discurso ante la Asamblea General de Naciones Unidas (ONU) (foto). “Algunos sólo pueden manejar este desafío levantando muros más altos, reprimiendo migrantes con violencia o asegurándose que otros se hagan responsables. Los quieren lo más lejos posible”, dijo Tsipras. “No creemos que el futuro de Europa o del mundo esté en muros más altos o en niños muriendo ante las puertas de nuestras casas. No podemos permitir que el racismo y la xenofobia destruyan nuestros principios comunes”, remarcó el primer ministro heleno. El jefe del Gobierno heleno dijo que la crisis de refugiados que atraviesa su país se une a la crisis económica y a los riesgos para la seguridad que representa tanto el conflicto de Ucrania como los de Oriente Medio, lo que ubica a esa nación en un triángulo de desestabilización. En ese sentido, respaldó las gestiones de la ONU para buscar un final al conflicto en Libia, apoyó la integridad territorial de Ucrania y pidió acciones para promover la reconciliación en Siria.

Luego, Tsipras reclamó más apoyo financiero para Grecia de manera que pueda hacer frente a la problemática que atraviesa. “Con la cooperación de la Unión Europea y otras organizaciones internacionales, estamos haciendo todo lo que podemos para hacer frente a estos flujos de una manera efectiva y humana”, afirmó. Grecia, dijo Tsipras, está al frente de un flujo de migrantes sin precedentes: desde comienzos de este año, unas 300.000 personas, la mayoría de Siria, Irak y Afganistán, ingresaron al país en tránsito hacia naciones de Europa Occidental. El primer ministro manifestó que algunos, a quienes no identificó, piensan que la única manera de afrontar este desafío es rechazar a los migrantes por la fuerza y asegurarse de que sean la responsabilidad de otro, lo más lejos posible. “No podemos olvidar –añadió– que muchos de nuestros antepasados fueron refugiados y migrantes”.

Tsipras se refirió también a la crisis que afectó a su país a partir de 2008 y las gestiones que llevaron a firmar un acuerdo con sus principales acreedores y que incluyó fuertes medidas de austeridad pública. “Tenemos que reconocer que necesitamos un sistema financiero y económico global orientado a impulsar estrategias de crecimiento nacional”, afirmó el primer ministro griego. También señaló que Grecia se encuentra “en el corazón de un triángulo de desestabilización” por los conflictos armados en Ucrania, Libia y Oriente Medio.

Grecia alojará a cientos de refugiados en instalaciones construidas para los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, hasta ahora vacías, informó ayer la radio estatal. Por la mañana, varios autobuses recogieron a los refugiados en la plaza Victoria, en Atenas, donde permanecían desde hace semanas en malas condiciones sanitarias, y fueron trasladados a las instalaciones olímpicas en la zona de Galatsi. En el albergue donde se habilitaron espacios para los refugiados se disputaron en 2004 competencias de tenis de mesa. Mientras tanto, los refugiados siguen llegando a las islas del mar Egeo. Los guardacostas rescataron ayer a 90 personas frente a las costas de las islas de Lesbos y Quios, según fuentes oficiales del país heleno.

Medio millón de migrantes y refugiados llegaron en los primeros nueve meses del año a las costas europeas, cifra que se estima alcanzará las 700.000 personas en 2015 y la misma cantidad en 2016. Así lo advirtió ayer la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) en una convocatoria para recaudar fondos para financiar la crisis migratoria en el Mediterráneo.