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Un artefacto artesanal estalló anoche durante la celebración de un encuentro electoral del viceprimer ministro Gianfranco Fini en Bolonia (norte de Italia), causando seis heridos, anunció la agencia italiana Ansa. El artefacto estaba situado debajo de un vehículo de la campaña electoral, que estaba estacionado a unos metros del palco donde se encontraba Fini, jefe de la Alianza Nacional, formación de derecha que integra la coalición gubernamental de Silvio Berlusconi.
Fini, que resultó indemne, prosiguió su reunión. “Miren lo que son capaces de hacer”, dijo al invitar a sus auditores a permanecer en sus lugares y mantener la calma mientras los servicios de socorro y la policía hacían su trabajo, precisó Ansa. Cuatro de los heridos recibieron atención médica en el lugar de los hechos y otros dos fueron trasladados al hospital, añadió la agencia. Los investigadores dan prioridad a la pista de anarquistas insurrectos, indicó la misma fuente sin dar más datos.
Según un responsable de la prefectura de la policía de Boloña, Luigi Vita, se trata de un artefacto incendiario compuesto por una botella de plástico llena de un líquido inflamable y una especie de detonador. El detonador explotó, pero el líquido no ardió, lo que probablemente contribuyó a limitar los daños, agregó.
Italia está en campaña electoral para las elecciones europeas del próximo fin de semana, que coincidirán en ese país con importantes comicios regionales. Varias personalidades políticas tanto de derecha como de la izquierda condenaron el acto. “Quiero expresar mi total y profunda condena de este acto vil y de cualquier forma de violencia durante la campaña electoral”, dijo Francesco Rutelli, líder de la alianza La Margarita y jefe de la oposición. Fausto Bertinotti, líder de la Refundación Comunista, subrayó que hay “que lanzar un grito de alarma” y “pedir la participación de todos los movimientos y los ciudadanos en la lucha contra la violencia”. “El atentado de Boloña es un acto contra la democracia”, aseguró. Sandro Bondi, coordinador de Forza Italia, el partido de Berlusconi, manifestó la solidaridad de su formación con Fini por lo que calificó de “gravísimo episodio de violencia”. El ministro de Relaciones Exteriores italiano, Franco Frattini, mencionó “una estrategia paraterrorista” de los autores del atentado.
La explosión de este artefacto artesanal es el último de una serie de actos dirigidos contra la Alianza Nacional (AN), partido de derecha que nació de una formación neofascista. Varios ataques se han producido recientemente contra las oficinas de la AN. En la madrugada del domingo la oficina electoral de Livorno del ministro del Medioambiente, Altero Matteoli, fue saqueada por varias decenas de personas.