EL MUNDO
Archivos de la guerra
La Santa Sede autorizó ayer la apertura de sus archivos sobre los 2.100.000 prisioneros alemanes y de los ejércitos aliados durante la Segunda Guerra Mundial y de las víctimas de las persecuciones políticas, religiosas y raciales en ese período. Así el Vaticano permitirá consultar los 2349 documentos archivados en su Oficina de Información para los prisioneros de guerra (1939-1947). El trabajo de una comisión mixta de historiadores judíos y católicos, creada en 1999 y encargada de examinar el papel de la Iglesia Católica durante ese período, fue suspendido en 2002 a pedido del Congreso Judío Mundial, que acusó al Vaticano de impedir abrir esos archivos. Un historiador cercano al Vaticano, el jesuita Giovanni Sale, que tuvo acceso a la documentación secreta del Vaticano así como a los archivos de la revista Civiltá Cattolica, reconoce que existía entonces una extensa cultura “antijudía” dentro de la Iglesia Católica.