Ayer no fue un buen día para el narcotráfico. La policía colombiana y la DEA detuvieron a 30 miembros de una red internacional que transportaba cocaína y heroína desde puertos colombianos y de otros países latinoamericanos a distintas ciudades de Estados Unidos. Las redadas se realizaron de forma simultánea en los dos países. En tanto, en México, la Procuraduría General arrestó a uno de los líderes del cártel responsable de transportar marihuana en la zona fronteriza con Guatemala.

Durante la operación Mercaderes, seis dominicanos fueron capturados por oficiales de la DEA –la Agencia Antidrogas de Estados Unidos– en las ciudades de Orlando y Nueva York. En esas redadas se decomisaron además cinco kilos de heroína. En Colombia, el operativo y los resultados fueron aún mayores. “La policía realizó más de 25 allanamientos en las ciudades de Pereira, Bogotá, Cali, Cartago, Caicedonia, Bucaramanga, Cúcuta, Barranquilla y Medellín. Se capturaron 24 personas, entre ellas seis que son requeridas por el gobierno estadounidense con fines de extradición”, informó un comunicado de la agencia estadounidense. Estos allanamientos son parte de una serie de operativos que comenzó hace ya varios meses y que involucra a los países productores o exportadores de droga. Con ayuda de las fuerzas de seguridad locales, la DEA ya ha conseguido detener a 117 personas.

En México, mientras tanto, cayó uno de los líderes del cártel del Istmo, una organización con base en Oaxaca, pero con influencia en varios estados del sur y del sureste del país. Pedro Díaz Parada era uno de los principales traficantes de marihuana de esa zona y dominaba la mayor parte del tráfico a través de la frontera con Guatemala. Cuando lo detuvieron, Parada tenía armas que son exclusivas del ejército nacional y llevaba un importante cargamento de marihuana. El arresto fue recibido por la Procuraduría como un nuevo éxito del gobierno de Felipe Calderón, quien a sólo semanas de asumir, el primero de diciembre pasado, lanzó un megaoperativo para combatir al narcotráfico en los empobrecidos estados del sur.