EL MUNDO › MEXICO CEDIO ANTE SUS CAMPESINOS
Un machetazo al aeropuerto
El gobierno de México ha cedido a un grupo de campesinos macheteros y abortó un plan para construir un nuevo aeropuerto internacional en su tierra, el lecho seco del lago de Texcoco. “Fue un acto sensato y maduro”, dijo el ministro de Transportes Pedro Cerisola en una entrevista radial ayer. La decisión fue anunciada tarde el jueves mientras la atención del país se concentraba en la partida de México del Papa, y abolió las órdenes de expropiación de 4000 hectáreas de tierra emitidas en noviembre, cuando el gobierno anunció que construiría el nuevo aeropuerto de seis pistas y 2300 millones de dólares en Texcoco, en la periferia oeste de la capital.
Los campesinos propietarios de la tierra en torno de la pequeña localidad de San Salvador Atenco se opusieron al proyecto desde el comienzo, insistiendo que preferirían morir antes que ceder sus tierras y unirse a las filas de los pobres en las villas miseria suburbanas. Celebraron su victoria con fuegos artificiales y cantando “Tierra sí, aeropuertos no”. Algunos dijeron que el paso atrás del gobierno fue un milagro asociado a la visita del Papa. Su causa parecía sin esperanzas cuando comenzaron las protestas, dada la importancia del aeropuerto para el gobierno. Se necesita al nuevo aeropuerto para aliviar al actual, que está casi al tope de su capacidad.
Pero las marchas de los campesinos, marcadas por retórica revolucionaria y romántica, machetes y armas de juguete, se volvieron más serias, atrayendo el respaldo de grupos radicalizados del país y del exterior. A mediados del mes pasado, un choque entre los manifestantes y la policía antidisturbios derivó en una crisis cuando los campesinos tomaron rehenes y se replegaron dentro de Atenco, detrás de barricadas en llamas. Cinco días de negociaciones llevaron a un canje de unos 12 rehenes por manifestantes detenidos, y al inicio de un diálogo.