El gobierno argentino condenó ayer el atentado contra una casa cuartel de la Guardia Civil en Burgos, al norte de España, que dejó 64 heridos leves y fue atribuido a la organización separatista armada vasca ETA, según un comunicado de la Cancillería. “En nombre del gobierno argentino y en el mío propio, una vez más debemos lamentar y condenar en los términos más firmes e inequívocos este nuevo ataque a la paz y a la convivencia civilizada que sufre España”, afirmó en la nota el canciller Jorge Taiana.

El ministro de Relaciones Exteriores señaló, asimismo, que “Argentina se asocia a España en la condena, en el dolor y en la renovada convicción de que sólo las instituciones de la democracia, del diálogo y de la participación ciudadana ofrecen los canales legítimos de expresión en el estado de derecho”. El canciller transmitió su solidaridad a las familias “afectadas por el trágico episodio” y sus “votos de restablecimiento para las víctimas del atentado”. El coche bomba, según los primeros informes, habría sido una furgoneta que estuvo estacionada frente al edificio durante más de 14 horas. La explosión fue de madrugada.