EL MUNDO › CHIITAS BAJO ATAQUES CONSTANTES
El blanco paciente
Por Anne Penketh*
Anoche se temía que la estampida sobre el puente Imans se convirtiera en el hecho que causara que la sufriente comunidad chiíta de Irak tome las armas contra los insurgentes liderados por los sunnitas y comience una guerra civil a gran escala. Líderes sunnitas trataban ansiosamente anoche de calmar la situación, mientras las emociones aumentaban después de la estampida de los peregrinos. El ministro de Defensa, Saadoun al Dulaimi, él mismo un árabe sunnita, insistió por televisión en que “lo que sucedió no tiene nada que ver con ninguna tensión sectaria”.
Sin embargo, la temperatura política estuvo aumentando durante el día. Hasta los moderados en la comunidad sunnita están irritados por el borrador de la Constitución que fue forzado desde el comienzo de la semana por los chiítas dominantes y las comunidades kurdas representadas en el comité del borrador. Los 15 sunnitas del comité rechazaron el borrador, que probablemente inflamaría las tensiones sectarias debido a su insistencia en el federalismo. Los sunnitas están preocupados porque Irak, que ellos gobernaron bajo Saddam Hussein, quede repartido entre los kurdos y los chiítas, cuyas regiones son el hogar de la riqueza petrolera del país.
Los chiítas llegaron tarde al federalismo, pero viendo la insistencia de los kurdos en retener su autonomía en la región norte que disfrutaron desde 1991, se dieron cuenta de que tenían una carta petrolera para jugar. Se supone que el próximo paso a lo largo del camino será el referéndum constitucional del 15 de octubre, antes de las elecciones de diciembre que producirán un nuevo Parlamento iraquí y permitirán que la coalición liderada por Estados Unidos retire las 150.000 tropas todavía en Irak. Los sunnitas ya están haciendo campaña por un voto No. Las esperanzas de Estados Unidos de modificar el borrador de la Constitución para obtener alguna clase de apoyo parecen destinadas al fracaso.
Los chiítas de Irak han demostrado una notable moderación a medida que continuaron los ataques con bomba. Fueron blanco sistemático de los militantes sunnitas y de los terroristas de Abu Musab Al-Zarqawi, quien intenta gatillar una guerra a gran escala entre las dos comunidades. La cuestión ahora es: ¿cuánto más durará la moderación de los chiítas?
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Celita Doyhambéhère.