Los dirigentes del agro volvieron a solicitar ayer la suspensión del esquema de retenciones móviles mientras el tema se discute en el Congreso. El pedido lo formularon Eduardo Buzzi, titular de Federación Agraria, y Luciano Miguens, presidente de la Sociedad Rural, luego de una reunión que mantuvo la Comisión de Enlace en la sede de Confederaciones Rurales para analizar los avances que se registraron en la primera semana de discusión parlamentaria. Además, criticaron las declaraciones del ex presidente Néstor Kirchner, que el jueves intentó ponerle freno al lobby empresario al pedirles a los legisladores que no modifiquen el proyecto enviado por el Poder Ejecutivo. “Lamentamos que en lugar de ayudar a calmar la situación tenga una actitud de provocación”, aseguró Buzzi.

Los ruralistas estuvieron toda la semana reuniéndose con legisladores para pedirles que no ratifiquen la resolución 125, que establece el esquema de retenciones móviles. Como era de esperar, el mayor respaldo provino de los partidos de la oposición, que dejaron en claro que van a rechazar el proyecto de ratificación y ayer también pidieron la suspensión de la norma (ver página 9). No obstante, la mayor preocupación de los empresarios pasa por lograr adhesiones entre los diputados oficialistas.

Hasta el momento, donde mejor receptividad lograron es entre los legisladores que responden al vicepresidente Julio Cobos y al ex gobernador de la provincia de Buenos Aires y actual diputado, Felipe Solá. PáginaI12 informó ayer que ese grupo está impulsando un proyecto alternativo que propone una rebaja de las retenciones del 46,5 al 40,5 por ciento a valores actuales, conservando el criterio de movilidad, el cual cuenta con el aval de algunos ruralistas. Buzzi lo reconoció ayer de manera implícita al señalar que “hay que buscar una posición intermedia”. “Tenemos que ser muy cuidadosos, la 125 como está no puede ser aprobada y la derogación tampoco”, agregó. No obstante, cuando le pidieron más precisiones se limitó a decir que “no somos legisladores No tenemos la posibilidad de presentar un contraproyecto”.

Los empresarios se entusiasmaron con el lobby que vienen realizando sobre el oficialismo a través de Cobos y Solá. El jueves incluso algunos asesores de las entidades llegaron a plantearles esa propuesta a los asesores de Agustín Rossi, jefe de la bancada oficialista; Alberto Cantero, presidente de la Comisión de Agricultura, y Walter Agosto, titular de la Comisión de Presupuesto. Sin embargo, las palabras que formuló Néstor Kirchner esa misma noche bajaron las expectativas de la dirigencia rural. “Tengan coraje, pónganla, jueguen con fuerza”, les reclamó el ex presidente a sus legisladores al defender la resolución 125. En vista de ese rechazo es que los productores volvieron a insistir con la suspensión de la norma. “Entendemos que obtener consenso no es fácil y creemos que lo lógico sería suspender el régimen actual de retenciones y volver al 35 por ciento mientras se debate en el Congreso.” Los ruralistas vienen reclamando eso desde que comenzó el conflicto. Lo piden para descomprimir la situación, pero en realidad lo desean, porque una suspensión temporal les permitiría vender lo que queda de la cosecha de soja con la retención anterior y el impacto de lo que decidiera el Congreso recién se notaría en la campaña próxima.

Hasta ahora, el Gobierno resistió esa presión. Lo único que ofrece es dejar la resolución 125 sin cambios y compensar a los productores pequeños y medianos con normas complementarias, como una ley de arrendamiento, mayores incentivos para otras producciones como carne, leche y trigo y mejoras en el régimen de reintegros. Fuentes del sector señalaron a PáginaI12 que Eduardo Buzzi se habría mostrado más permeable frente a este ofrecimiento, pero, tal como viene ocurriendo desde que comenzó el conflicto, el encargado de endurecer la posición dentro de Federación Agraria y encolumnarse con el resto de las entidades fue el chacarero Alfredo De Angeli, que hoy por hoy marca el paso entre los federados.