EL PAíS
Mucha magia, demasiada historia oficial y pocas pruebas sobre la AMIA
Una maniobra de acción psicológica con origen dudoso dio por esclarecido el atentado de 1994, pero los detalles se parecen mucho a la historia oficial construida en los últimos ocho años sin ninguna evidencia concluyente. Falacias y datos.
Por Raúl Kollmann
“Fue esclarecido el atentado de la AMIA.” La información, publicada por un matutino porteño, supuestamente salió de una reunión realizada en Washington entre funcionarios de la CIA y el titular de la SIDE, Miguel Angel Toma. La central de espías argentinos hizo trascender ayer que “no confirmamos ni desmentimos la información”, lo que en verdad constituye una confirmación. Eso sí, allegados a la cúpula de la SIDE reconocieron que “los datos no son tan concretos ni las cosas están tan avanzadas”.
El grueso de lo que afirman supuestamente la CIA y la SIDE es lo que se viene diciendo –casi sin pruebas– desde hace años, aunque ahora aparecen dos novedades.
La primera es que los servicios de inteligencia dicen tener identificado al suicida, aunque todavía no dieron a conocer el nombre y –lo fundamental– las pruebas. La segunda es que, afirman, los policías bonaerenses que están siendo juzgados eran corruptos pero no sabían del atentado, por lo cual serían inocentes. Los abogados de los policías pedirán el lunes en el juicio oral que la SIDE informe oficialmente sobre el tema y reclamarán la libertad de sus defendidos.
El diario Ambito Financiero fue el que publicó ayer lo que en gran parte es la historia oficial del atentado contra la AMIA. A continuación la versión publicada ayer, casi idéntica a esa historia oficial, acompañada de los datos que la ponen en duda:
- Detrás del atentado estuvo Irán. En aquel 1994, año del atentado, “el eje del mal” pasaba por Teherán y el régimen de los ayatolas. La pista siria siempre fue descartada porque ya Siria estaba en una postura más negociadora en Oriente Medio. Además, al menemismo esa pista no le gustaba en absoluto porque remitía a Monzer Al Kassar, Ibrahim al Ibrahim y otros personajes cercanos a Carlos Menem.
- El atentado fue perpetrado por la organización libanesa Hezbollah, que era financiada por Irán. Resulta curioso que sólo se mirara hacia Irán cuando Siria sin duda debía entrar en la sospecha ya que controlaba todo el Líbano. Las pruebas siempre fueron escasas y se basaron en informes de inteligencia y testimonios de arrepentidos con relativa credibilidad, ya que no aportaron ningún dato concreto sobre cómo se hizo todo en la Argentina.
- Hubo un suicida. Esto nunca se pudo confirmar con pruebas en la causa judicial. Como no hubo ADN de las 85 víctimas, fue imposible corroborar si hubo un muerto 86 que no se correspondía con ningún familiar y que sería el suicida.
- El suicida está identificado. Supuestamente esto lo dicen la SIDE y la CIA, aunque el juzgado de Juan José Galeano hizo trascender anoche que existe una declaración de un testigo de identidad reservada: “Es información de inteligencia, que será difícil comprobar”. Una fuente de la SIDE repitió el mismo concepto: “Tal vez haya pruebas, pero es difícil”.
- El suicida era el jefe del comando y que entró por la Triple Frontera. Esto también se viene diciendo desde años, pero no se presentó otra evidencia que hablar de grupos fundamentalistas en la zona.
- Los policías bonaerenses, ahora juzgados, eran corruptos, pero no sabían del atentado. Si hubiera alguna evidencia de ese estilo, los policías saldrían inocentes del juicio oral ya que se los juzga como cómplices del atentado. Este fue el único aspecto que la DAIA no consideró creíble: “No coincidimos en ese punto. Vamos a probar en el juicio que tuvieron que ver con el atentado”, aseguró José Hercman, de la DAIA. Por de pronto, José Manuel Ubeira, defensor del ex comisario Ribelli, pedirá el lunes en el juicio oral un informe oficial de la SIDE y eventualmente la libertad de su cliente. Otros letrados están en la misma postura.
Diferenciándose de la DAIA, que respaldó las novedades, el abogado de la AMIA, Miguel Bronfman, sostuvo que “el atentado está muy lejos deesclarecerse. Dan nombres, pero en general son los que se mencionan desde hace años”.
Una importantísima fuente de la SIDE le dijo anoche a Página/12 que “por ahora no tenemos elementos para presentar a la justicia. Esperamos que antes de terminar la gestión de Duhalde hayamos colectado evidencias que permitan avanzar en la causa”.