“Espanta los vicios, le hace bien a la cabeza, uno que está todo el día pensando”, asegura el vicepresidente Julio Cobos. Para lidiar con el intenso estrés de la política, Cobos se refugia en el deporte, yendo al gimnasio entre 2 y 3 veces por semana. Habitualmente aprovecha el tiempo muerto después de un almuerzo livianito y se escapa de su despacho en el Senado para hacer ejercicio. La confesión sobre sus saludables hábitos la hizo a un programa de cable que se emitirá mañana y lo mostrará siguiendo su rutina deportiva en un moderno gimnasio.

Tan es así que cuando el vice salió sorpresivamente para visitar la Rural el martes pasado al mediodía, sus asesores le preguntaron si se iba al gimnasio y él les respondió que no, sin dar demasiados detalles. Por una decisión estratégica de sus asesores de imagen o simplemente en busca de mostrar una faceta personal, el vice empezó a explotar su intimidad. La balanza se inclina por la primera opción cuando el publicista Carlos Souto aparece entre los hombres que manejó su campaña para gobernador de Mendoza en 2003, la campaña del radicalismo mendocino en 2007, y sigue aconsejándolo, ahora como vicepresidente.

Durante el conflicto con las entidades rurales, el vice comenzó a mostrar su costado más personal en una extensa entrevista para la revista Caras. Ya había comenzado a levantar su perfil distanciándose de la posición oficial y en ese momento ya relataba su inclinación por el deporte como escape de las presiones de la función pública.

En el programa que emitirá mañana el canal C5N cuenta que de chico jugaba al softball en su escuela primaria y continuó actividad física cuando ingresó al Liceo militar en su provincia. Ahora que tiene una agenda cargada de reuniones, Cobos no resigna su tiempo para desenchufarse. Asegura que así “me ahorro el cardiólogo y el psicólogo”.

Cuando votó en contra del proyecto de retenciones móviles volvió unos días en su provincia para reponer energías y retomó la actividad con intensidad. Además del trabajó en el Parlamento, recibió en su despacho a Alfredo De Angeli y al diputado Felipe Solá, se entrevistó con el rector de la Universidad de Buenos Aires, Rubén Hallú, llamó a Carlos Menem para ver cómo estaba, visitó la Rural, expuso en una conferencia sobre formación de dirigentes políticos y tuvo reiterados encuentros con sus hombres más cercanos para delinear su estrategia política.

Cuando PáginaI12 consultó a sus colaboradores sobre los planes para el futuro inmediato aseguran que “hace lo que le sale en el momento”. “De la misma manera que no pensábamos que iba a ir a la Rural y fue, está manejándose bastante con su olfato”, admiten. Los que lo conocen desde hace tiempo afirman que tenía la misma impronta cuando estaba al frente del gobierno provincial. “Le tiene que agarrar –dicen cerca suyo–, él elige el momento y que después los demás interpreten lo que quieran.”

Sin embargo, eso no significa que sea un improvisado. En más de una oportunidad, cuando el vice hace alguna movida polémica, reconocieron que “no es inocente” y que es consciente de la significación política de cada uno de sus actos.

Carlos Souto es uno de los publicistas que lo asesoraría junto al mendocino Gustavo Videla. Fue uno de los responsables de la campaña que llevó a Cobos a la gobernación en 2003 y aunque no tuvo el mismo éxito con su delfín Carlos Biffi en 2007, siguió acompañando al vice cuando hablaba con entusiasmo del eslogan “Cristina, Cobos y Vos”. Souto también trabajó para Fernando de la Rúa durante el gobierno de la Alianza y fue el creador del famoso “Vamos Menem”, campaña del actual senador antes de renunciar al ballottage con Néstor Kirchner.

Después de estos últimos días de mucha exposición pareciera que Cobos va a regular su aparición pública. Ayer recibió a dos intendentes de Chaco que le comentaron la crítica situación que vive la provincia debido a las sequías y, a su vez, suspendió el relanzamiento de la Concertación mendocina previsto para éste sábado. “Parece que va a tener un fin de semana híper tranquilo”, repetían en su entorno. De ser verdad, quienes quieran escucharlo tendrán que conformarse con sus consejos sobre salud.